Me estoy sintiendo mayor. He leído y oído a gente que se queja porque hacen arreglos en su casa: que si el polvo, que si el desorden, que si el ruido. Creo que nunca había estado en esa situación, y hoy que me toca, como toda una señora, quisiera que acabaran de una vez. Desordenado ya tenía, no son ruidosos y de hecho, son agradables. Pero necesitan dejar la puerta abierta, y se mete el frío. No puedo moverme con libertad por la cocina y tampoco he podido bañarme. Ya sé que he comentado que no me apura no bañarme; pero no me da tan igual si no puedo bañarme cuando quiero...
Silvia Parque