Hasta la vista, Majestades

Publicado el 07 enero 2012 por Beatrizbeneitez
Beatriz Benéitez Burgada. SantanderEl día de Reyes es mi preferido de todo el año. Ya lo he dicho en este rincón en alguna ocasión. Las peques bajando nerviosas las escaleras, en pijama y sin haberse despertado del todo. No saben si han venido, ellas no han oído nada. La imagen irrepetible de su cara al ver que Sus Majestades han estado en casa, el caos de juguetes, cuentos y otros regalos de los Magos de Oriente; el desayuno con rosco -de Vega-, algo que de verdad saboreamos unas pocas veces al año. Una agenda muy apretada: Visita a los abuelos, más regalos, comida en familia -felicidades mamá, estaba todo impresionante-, sobremesa, merienda con la tribu -éramos más de treinta-, visita a los padrinos, más regalos.... Un sin vivir, pero lleno de caras de ilusión y de sorpresa. Gestos que no volveremos a ver hasta dentro de un año y que, además, tienen fecha de caducidad. Los Reyes son para los niños, pero la mía es una de esas familias en las que los mayores hemos sabido conservar la ilusión. Y así despedimos la Navidad. Me encantaría que se inventara el teletransporte pero, en este momento, algo que también me gustaría mucho es que los regalos aparecieran ordenados y colocados en sus lugares, y que el árbol y todos los adornos se metieran solos en sus cajas y fueran dando un paseo hasta el garaje. Lo dejaré para el lunes. Este fin de semana prefiero disfrutar. Por cierto, que bien se han portado los Reyes. O que bien me he portado yo. Las peques también porque, como veis, la granja no tiene uno, sino dos tractores, y hasta un camión para repartir la leche. Debe de ser también por todo lo que gritamos en la Cabalgata. Gracias Majestades, y hasta la vista. Os esperamos el año que viene. Procuraremos portarnos bien.