
Este invierno está siendo inusualmente frío. La verdad, entran ganas de caldito y mesa camilla. O de mantita en el sofá y de ver 3 pelis seguidas. O de leerse un buen libro de una sentada. A que echáis algo en falta? Y yo.
Me temo que se me ha congelado la líbido. Y, por los síntomas que me veo, o para ser más exacta, por los que me faltan, me temo que esto durará hasta primavera.
Seamos positivos, no todo está perdido. A ver, puedo disfrutar de cosas que, en condiciones normales, me está vedadas.
Por ejemplo:
1. Puedo ir a tomar un café con una chica sin andar todo el tiempo pensando en la mejor manera de llevármela a la cama
2. Puedo escuchar lo que me diga esa chica. Y puedo, incluso, disfrutar de la conversación.
3. Una vez descubiertos los placeres de la comunicación, puedo, incluso, charlar con un chico.
4. Puedo andar por la calle, caso que me atreva a hacerlo, dado el frío que hace, pensando en lo que voy a hacer, y no en qué andan poniéndose las mujeres hoy en día, que están todas tan estupendas.
5. Puedo ver una peli y fijarme en la actuación de los hombres, que normalmente me son invisibles.
Pues eso, a deleitarme con estos pequeños placeres, que me queda apenas un mes para que mis hormonas, todas ellas, se despierten.
Cómo lo lleváis vosotros, queridos fantasmas? Estáis hibernando como yo?Sigue leyendo