Revista Talentos
Caminé por los encrucijados laberintos para encontrarme con su mirada. Luché contra las bestias más salvajes para acariciar su suave piel. Atravesé los fuertes ciclones para sentir su susurro sobre mí. Escalé las afiladas altas montañas que alcanzan el cielo, y sin aliento, un beso suyo fue lo que perdí.