Historia simple

Publicado el 18 septiembre 2012 por Netomancia @netomancia
La inseguridad había acorralado al pueblo. En pocos meses, el miedo devoró las calles. Los vecinos se hicieron de armas y los disparos comenzaron a escucharse a toda hora. En dos meses apenas si quedaban un centenar de habitantes vivos. Sonrieron entre si y se organizaron para arrasar con todas las viviendas. No quedó nada de valor, ni siquiera alguien que recordara los buenos tiempos. Los delincuentes se marcharon a otro lugar, donde poder sembrar el pánico. El pueblo quedó desierto y sin moralejas.