Aceite de oliva, anchoas, ajo, tomate, orégano, aceitunas negras, alcaparras, sal a gusto y pizca de pimienta negra molida (más sano que el mejor de los políticos)
Es que una campaña es copia de la anterior: nada nuevo, van a lo suyo, hacerse con la pasta vendiéndose para lo que sea al mejor postor – pasta y putanesca, versión polítiquera de la rancia tradición picaresca española; que más de un Lazarillo de Tormes o un Buscón Don Pablos habrá en las variopintas cohortes partidistas – pero in su riqueza cultural, ni siquiera un relato válido, todos quedan para el olvido.
Claro que los ciudadanos estamos indignados, sigue la reacción iniciada el 15M en muchas ciudades españolas.