Este es uno de los microrelatos enviados a concurso , que me apetecía compartir, la primera frase es obligada.
El leve crujir de la viga de la que cuelga su padre, le despierta nuevamente, su conciencia le impide seguir durmiendo como si todo le fuese ajeno.
Con perezosos pasos, se acerca hasta donde presume que puede hacerse oír y con voy meliflua le espeta directamente
.- Papá, sabes perfectamente que quedan cuatro años menos un día para las próximas olimpiadas; ¿No crees que deberías establecer un horario de entrenamiento más racional?.