Santo Tomás y la mujer pecadora.
[Al conocer a la naciente comunidad de Padres Dominicos, se une a ellos con la oposición de su familia.
Los hermanos al ver que Tomás no desistía de su idea, le envían una mujer de la mala vida para hacerlo pecar, pero el santo, con un tizón encendido, la amenaza con quemarle la cara, entonces la mujer salió despavorida.
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Lo admirable de este santo es que la sabiduría no la adquirió tanto en la lectura de libros, sino de rodillas y en oración ante el crucifijo.]
Tomás es confortado por los ángeles luego de la mala experiencia con la mujer. Velázquez