Nunca le intereso la política se convirtió en liberal después de haber sufrido decepciones de todos los partidos, aquello le sirvió para entender que la libertad del individuo era realmente valiosa.
La burocracia le resultaba estomagante y dura de digerir, además de una pérdida de tiempo, en lugar de facilitar las cosas las dificultaba.
No se afilió jamás a ningún partido, a lo sumo publicito las ideas con las que simpatizaba en sus espacios en internet.
Consideraba que era la mejor manera de hacer política sin mancharse las manos.
Estaba demasiado desencantado para ir de revolucionario para serlo hay que ser rico y él no lo era.
Ser liberal en España es recibir palos por todas partes.