Revista Talentos
Cuatro años sin aquel vestido. «Maravillosa» —le decía él—, «no hay mujer más hermosa». Alegre sinfonía de palabras y risas. «Halagador, bellísima»... Cogió el pintalabios, rojo oscuro mate, para remarcar su boca; «rojo tuslabios», que desaparecía por completo con sus besos. Alegría invernal camino del camposanto donde reposaba su hombre.