El insuflado es una técnica sencilla que suele gustarle mucho a los niños. Para hacerla sólo hay que tener muchas ganas de soplar.
Necesitarás: Témperas y pajitas.
Coloca unas gotas de témpera en un folio o cartulina (la témpera debe estar un poco líquida, suelta)
Sopla las gotas de témpera esparciéndolas en todas las direcciones
Aquí tenemos el resultado:
Algunos niños pueden sentirse mareados por soplar continuamente y con mucha fuerza, hay que mencionarlo al comenzar la actividad.