Invertir en la risa
Publicado el 30 diciembre 2011 por Davidsaavedra21
Si fuera el rey comenzaría diciendo "en estas fechas tan entrañables, me llena de orgullo y satisfacción", pero como no lo soy (como mucho era el rey de la casa hace unos años) dejo ese mensaje para los vídeos con los que voy llenando poco a poco los estantes de este bazar. Cierto es que estamos en unas fechas especiales, en vísperas de darle la bienvenida al nuevo año, aunque no sé muy bien si este nos va a recibir con los brazos abiertos; o sólamente con la mano abierta para atizarnos entre oreja y oreja.
El comienzo de año coincide con el nacimiento de este blog, del que ya se cumplen dos años en los que ha pasado de todo un poco: un mundial, muchos indignados, algunas tertulias, nuevos "colaboradores" que se iban sumando al blog; y sobre todo muchos amigos que se daban una vuelta por aquí para ver que había de nuevo. A todos ellos gracias y perdón, por ese orden; gracias porque si aquí no entrase nadie colgaríamos el cartel de cerrado por derribo, y perdón porque sé que a veces resulto "demasiado insistente" vía Tuenti, Twitter, Facebook...anunciando las novedades saavedrianas.
Me gustaría rescatar un anuncio que me ha llamado mucho la atención, y que supongo que la mayoría habréis visto. Se trata del último anuncio de Campofrío, en el que aparecen multitud de grandes humoristas de este país con la voz en off de Santiago Segura. Muchos de ellos me sirven de inspiración para ir mejorando poco a poco "mis inventos". Me quedo con algunos mensajes que se lanzan en el citado spot:
"Hay días en los que uno no se levanta con ganas de sonreír, y mucho menos de hacer sonreír a los demás. Esos días donde la realidad, parece tener un sólo punto de vista: el negativo. No es falta de inspiración, es el mal rollo que alguien te contagia, o esa sensación de que el mundo no está para bromas."
No descubro nada diciendo que nos ha tocado vivir una situación bastante complicada, en la que los telediarios dan más disgustos que otra cosa. Grandes expertos en cosas muy importantes, tanto que el común de los mortales no podemos ni quieren que podamos llegar a entender; nos recuerdan que nunca podremos ser tan "felices" como lo fuimos años atrás. Yo no soy experto en esas importancias, tampoco quiero serlo, y si lo fuera no me atrevería a ir por la vida dando lecciones a nadie. Siempre me han llamado la atención cosas más sencillas, y creo que ahí reside la auténtica felicidad, ésa a la que no se le puede rebajar la nota de calificación.
"En esos días, los que trabajamos intentando hacer sonreír a este país tenemos un pacto. Sin previo aviso, y sin que nadie se de cuenta, al primer síntoma de que el mal humor nos está ganando la batalla; nos encontramos allí donde algunos dicen que el maestro descansa (Miguel Gila)".
El homenaje que en el anuncio se hace a Miguel Gila, es bastante significativo por todo lo que se ha comentado anteriormente. Si hubo alguien capaz de darle la vuelta por completo a una situación horrenda como es una guerra, haciendo un humor sano y muy agudo, ese fue el señor Gila. Ahora nuestra guerra es diferente, nos disparan bonos basura y el enemigo, sin dejar de tener riesgo, se ha convertido en nuestra prima. Antes eran los sargentos los que nos ponían firmes, ahora son los mercados los que se encargan de ello. Si Miguel fue capaz de hacerlo ¿por qué íbamos nosotros a desistir? Sinceramente, aprendo mucho más con los programas de humor que con los debates político-económicos.Creo que los primeros toman mucho más en serio a su público que los segundos.
Finalmente, en el anuncio se lanza una pregunta al aire.
"Maestro, ¿se puede ver cada día el lado bueno de todo, con la que está cayendo?".
Yo, personalmente y desde mi humilde bitácora, intento que así sea. Es un ejercicio muy sano intentar darle la vuelta a todo lo que nos sucede, y pensar como trasladarlo aquí en forma de vídeo, fotomontaje o pequeño monólogo. Sí además consigo que mi mensaje llegue al otro lado, arrancando una pequeña sonrisa a quien lo recibe, la misión está más que cumplida. Espero que nunca falten tanto las ganas de reír, como las de hacer reír. A lo segundo me comprometo yo, así que por mi parte estaría encantado de seguir haciendo "trato" con vosotros.
Os deseo a todos un feliz año nuevo, y que no consigan recortarnos las ganas de sonreír ni le bajen la calificación a nuestro sentido del humor. No trabajo en Wall Street pero les recomiendo invertir en la risa, es lo más rentable que conozco.
"Que nada nos quite nuestra manera de disfrutar de la vida"