Jaimitos

Jaimitos. Ni idea tenía de que esto se llamaba así.
Parece ser que es un clásico de pastelería. De esos de los que sólo las abuelas conocen los nombre. Al parecer el Jaimito se encuentra en un parnaso geronto pastelero, junto con los merengues de café, el palo catalán, el milhojas de nata y las tartaletas de crema con manzana gelatinizada. Formaba parte de esas bandeja de pastelería para la comida de domingo, envueltas en papel, con dos bandas de cartón para que no se aplastaran y con una cinta cruzada con un nudito en la parte superior para formar un asa con la que transportarlo. Nada de cajitas como ahora. Bandeja con blonda.
Pues al lío. Y así les daréis una alegría a vuestras abuelas... y a alguno más, que por aquí, se han acabado rápido.
Ingredientes

1 lámina de masa de hojaldre
1/2 litro de leche
1 ramita de canela
1 corteza de limón
10 cucharadas de azúcar
2 cucharadas de harina de maíz
2 yemas
150 g de chocolate de cobertura

Al lío

Cortar la masa de hojaldre en porciones iguales y hornear.
Prepararla crema, poner 2/3 de la leche en un cazo, añadir el azúcar, la canela y la corteza de limón, calentar a fuego suave unos minutos para que a canela y el limón vayan dejando su aroma.
Mezclar el resto de la leche con las yemas y la harina de maíz hasta que se haya disuelto.
Subir el fuego para que la leche hierva. Retirar el cazo del fuego y dejar enfriar un poco. Añadir la mezcla anterior y remover bien. Volver a poner al fuego y remover sin parar hasta que la crema espese. Dejar enfriar.
Fundir el chocolate en el microondas a baja potencia, con cuidado de que no se queme.
Abrir las porciones de hojaldre por la mitad y pintar la parte superior de las porciones con chocolate fundido. Dejar enfriar.
Rellenar con una cuchara o manga pastelera las porciones de hojaldre de crema y cubrir con la parte superior con la cobertura de chocolate.
Guardar en la nevera.

Progreso

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