Pasear por él tranquilamente en un día normal, es un momento mágico y lleno de paz, aunque no hay que descartar visitar su mercado de flores la mañana del domingo, sobre todo si es primavera, ya que se suman la variedad de flores y plantas del jardín con el colorido de los puestos que allí se instalan. Como alguien lo definió, es un museo vivo. Fue fundado en 1987, por lo tanto este año ha cumplido veinticinco años, por este motivo se están celebrando diferentes actos.
Aquí tienes otra de tus singularidades – no me llames exagerado- y no lo digo por el compromiso de tu jardín por el patrimonio cultural y la educación medioambiental, es por el Museo de Paleobotánica único en Europa que está situado en el interior del Molino de la Alegría. Este molino se sitúa entre la ribera del Guadalquivir y el Jardín, conserva partes medievales y renacentista de los siglos XV-XVI, las dos plantas en altura se añadieron en el siglo pasado.
Mi afán y deleite, es habitar una y otra vez los rincones de tú mapaMi alegría… nunca dejas de sorprenderme
Molino de la Alegría