Una de las tantas frases que ofrece la película Jerry Maguire, de la que me considero súper fan; son tantas las veces que la he visto y cada vez que la pasan por televisión no puedo dejar de ver esa historia, llena de aprendizajes, sin efectos especiales (raro en las últimas películas de Tom Cruise) y sin embargo conmovedora, el relato de un hombre que aparentemente lo tenia todo, un buen trabajo, una linda novia, un futuro por delante. A pesar de todo eso sentía que a su vida le faltaba algo, y un día hace una reevaluación de sus propósitos, la inspiración de una noche se volvió su peor pesadilla cuando ese documento inspirador es el motivo de su despido, y comienza a forjarse nuevamente un camino, sin su novia que lo abandonó, sin amigos y con la carga de sentirse un perdedor. Además de toda la linda historia de amor que se teje, por supuesto están presentes esas lecciones de vida que ofrece y esa relación de amistad que forja con el único cliente que le quedó y el cual demanda demasiada atención producto de su enorme ego, aludo a la frase del título de mi escrito a una escena de la película en donde ambos personajes Rod y Jerry (cliente y manager) saliendo de un partido, Rod empieza a reclamarle a Jerry por no cumplir sus necesidades de sueldo y otros beneficios que él tanto esperaba y Jerry explota a tantos reclamos y se lanza una de las mejores frases: “sabes cual es tu problema, juegas con tu cabeza no con tu corazón…en tu vida personal corazón, cuando estas jugando piensas en lo que no te dieron en quien cobra más que tu” (no soy tan literal como quisiera) y dicho sea de paso la película esta llena de frases hermosas…..Y como siempre en mí eso es razón suficiente para que surjan cierto tipo de preguntas, como por ejemplo: ¿Cuándo utilizar la cabeza y cuándo el corazón?, en esta vida donde tenemos que tomar decisiones todos los días y a veces en fracción de segundo ¿Cuándo y cómo marcar la diferencia?, ¿Es posible pensar con el corazón? o él es sólo es un músculo receptor y manifestación pura en donde se sienten las emociones?
En estas etapa de mi vida me siento una sobreviviente, fracasos, críticas, desamores, traiciones, tristezas y pérdidas, y seguramente me falta sobrevivir a muchas cosas más, y no recuerdo haber pasado por situaciones en donde no haya pensado con el corazón con todo lo malo o bueno que eso implique. Se me ha criticado varias veces por ser hipersensible, pasar por momentos de depresión, que me afecta todo lo que me rodea, que me siente y que me acongoja el mundo en que vivo, que amo demasiado mi trabajo, que me ilusiono con facilidad, que a veces actúo como una niña, que pienso en pajaritos preñados….si todo esto representa pensar con el corazón entonces no solo pienso sino que vivo con el corazón.
Se me ha dicho que para sobrevivir a este mundo tengo que pensar con cabeza fría…y les juro amigos míos que lo he intentado, y lo único que me falta es ponerme una bolsa de hielo en la cabeza. He puesto muros, he tratado muchísimas veces de ser lo más objetiva que puedo en ciertas situaciones, he tratado de que la voz interna de los sentimientos no me afecte, de verme distante, concentrada, impasible, si es que todo esto significa pensar con la cabeza, pero las veces que lo hecho también he quedado atrapada en esos mismos muros, o sencillamente se me derrumban y no sé recoger esos escombros luego que doy la vuelta después de hacerme la dura, la más objetiva, cautelosa y reflexiva, me atacan como abejas fuera del panal lo más terribles sentimientos de culpa por mostrarme de tal manera cuando realmente dentro de mí fuero interno hay altos niveles de sentimentalismo puro.
No digo que pensar con la cabeza sea malo, ni pensar con el corazón sea lo mejor, definitivamente trae muchos vicios si no lo sabemos controlar, si ese río de sentimientos se desborda puede llegar hacer muy peligroso para la propia estima y al llevar las relaciones con los demás por caminos pocos sanos. Pero es que definitivamente a mi no me sirve de mucho pensar con la cabeza, no logro dar en el blanco, me gusta y me siento bien cuando pienso con el corazón, me anima, me vuelve jovial, alegre y saca lo mejor de mí, soy graciosa, receptiva, amistosa, extrovertida, me hace soñadora y espontánea….es como si volviera a ser niña, y eso me encanta! Una de estas mañanas al levantarme y recortar el papel del calendario éste decía: “La razón se hace adulta y vieja, el corazón permanece siempre niño”…tan equivocada no estoy ¿verdad?
Esto no quiere decir que no me he dado mis tropezones vaya que me los he dado…y bien duros, y tampoco quiere decir que al ser puro corazón (como Juan Corazón) a la que solo fata colocar un parche en forma de corazón en el ojo soy toda bondad digna de ser beatificada, todo lo contrario, a veces ese corazón también me ha llevado a caminar por el lado oscuro de mi ser, pero en definitiva tengo que aceptar lo que soy y seguir las indicaciones de mi amigo en las áreas importantes de mi vida, mi premisa y deseo tal vez lo resume Soledad Pastorutti en su canción: “Seguir siguiendo al corazón y coquetear con la intuición seguir creciendo y esquivando las rutinas, seguir soñando en un rincón seguir creyendo que hay un Dios que me enderece de un tirón la puntería, siempre voy detrás de lo que siento cada tanto muero y aquí estoy”.
Y si no eres de los que le pone mucho corazón a la vida te lo digo a la manera de El Rey… mi querido Elvis en una de las canciones del soudtrack de la película que comenzó todo esta locura literaria hecha con todo el corazón que te acabo de hacer leer, Jerry Maguire, que dice:
I dont worry
Whenever skies are gray above
got a pocketful of rainbows
got a heart full of love
Jéssica Millán
Blog