Just listen, de Sarah Dessen

 Just listen de Sarah Dessen
El libro cayó en mis manos un martes, aunque hasta el miércoles no pude abrirlo. "Voy a leer un ratito después de comer", me dije. Sí. Ya. Un ratito. Inocente de mí... Estuve toda la tarde leyendo y lo habría terminado de no ser por esa molesta costumbre-necesidad humana de dormir (y más teniendo clase al día siguiente). Pero vamos, que la tarde siguiente ya estaba finiquitado. Nunca había leído nada de Sarah Dessen, a pesar de que me la habían recomendado insistentemente, y ya os digo que con un único libro me ha ganado.
Si hay algo que no me gusta de la juvenil romántica es que a veces tratan al lector y a los propios personajes de tontos. Demasiadas veces son títeres cuya única función es enamorar y enamorarse: chico conoce a chica (y viceversa), se enamoran, se aman hasta el fin de los tiempos, hay un obstáculo, lo superan y se aman hasta el fin de los tiempos porque el amor es el arma más poderosa del mundo (menos en el caso de Nicholas Sparks, que no deja que sus personajes vivan felices, pobres). ¡Pues no! No, señores, el mundo no es así y por muy jóvenes que seamos, ¡no somos tontos! A mí me gustan las historias reales, de personajes creíbles, con profundidad, que te atrapen. En Just listen, Sarah Dessen consigue eso y más.
Annabel Green es la chica que lo tiene todo. Al menos ese es el papel que interpretaba en el anuncio de unos grandes almacenes. Pero en este nuevo curso, es la chica que no tiene nada: ni mejor amiga, porque Sophie no quiere saber nada de ella; ni paz en casa, ya que los trastornos alimenticios de su hermana mediana mantienen en vilo a toda la familia; ni nadie con quien sentarse a comer en el colegio. Hasta que conoce a Owen Armstrong: intenso, obsesionado con la música y decidido a decir siempre la verdad, sin importarle las consecuencias. Con la ayuda de Owen, quizá Annabel encuentre el valor de afrontar lo que de verdad ocurrió la noche en que Sophie y ella dejaron de ser amigas.
Tengo que admitir que me costó engancharme realmente a la historia. Sarah Dessen profundiza en el entorno de Annabel, lo que es necesario, pero en algún momento recuerdo que llegué a pensar: "Sí, sí, ya conozco a su hermana. ¡Vayamos a lo que importa, volvamos a Annabel!". Curiosamente, al mismo tiempo quería saber más sobre las hermanas de la protagonista. Es un comienzo un poco raro, pero no lento lentísimo.
He dicho primero lo malo para poder liberarme con el resto de la reseña. Así que allí voy.
Sarah, Sarah, Sarah. Me encanta su estilo. Es juvenil y adulto, fresco y maduro: la perfecta unión de dos concepciones literarias que a veces, desgraciadamente, nos emperramos en separar. Juvenil no significa tonto, ni significa mocciano, y romántica no significa rosa y pajaritos cantarines. Aún hay quien no se lo cree, así que un aplauso a Dessen por demostrar que no es así. He disfrutado como una enana con Just listen, con la historia de Annabel y Owen, emocionándome por nada, gritando y lanzando chillidos (así soy yo). Pero también ha tenido momentos muy duros y dramáticos, empezando por el suceso misterioso que ocurrió en la fiesta en la que Sophie y Annabel se enamistaron y pasando por los dramas personales de su madre y de su hermana Whitney.
Lo mejor de la novela es que es real. No digo realista, digo real. Real porque de verdad crees que lo que cuenta puede ocurrir. No hay amores ni odios a primera vista, ni promesas de amor eterno, ni azúcar o polvos de hada. Los personajes podrían ser tus vecinos perfectamente. Personas reales, con sus más y sus menos, sus penas y alegrías, sus defectos y sus cualidades... Todos los personajes tienen su gracia, un algo que hace que te caigan simpáticos o antipáticos. Ni uno solo deja indiferente. Owen, su hermana Mallory-cool-de-la-muerte, las hermanas de Annabel... ¡Ah! Y si has leído Una canción para ti (aunque no es mi caso, por desgracia de mi alma ya desseniana), ¡atención!, porque salen Dexter y Remi. Ahí lo dejo.
Como he dicho, al principio quizás es algo lento, pero pasado el tramo introductorio, a mí me enganchó muchísimo. Sarah Dessen consigue crear un ritmo muy bueno para una novela sin acción, en la que la fuerza reside sobre todo en los diálogos. Que por cierto, ¡qué conversaciones! Es otra de las cosas que me ha encantado, y es que la autora se maneja muy bien con los diálogos: ingeniosos, con sentido y con chispa. Owen ha conseguido enamorarme con sus reflexiones sobre la música o la sinceridad, un tema que realmente se trata muy poco, tanto en nuestro día a día como en la literatura. Siempre digo que hay libros que te dejan un poso después de leerlo. Pues Just listen es uno de ellos. Más de una vez me he sorprendido pensando: "shh, sé sincera, ¡sé como Owen!".
En definitiva: quiero más Dessen. Just listen es una novela redona, aunque claro, si te gusta el género (ya imaginaréis que nada de caballeros, ni magos, ni gobernadores malvados). Como he dicho por ahí, Dessen es un ejemplo de literatura juvenil romántica de calidad. Profunda, sin parches, bonita y muy adictiva.
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