El revolucionario del tenis no pudo contra una cancha revolucionaria. Rafael Nadal quedó fuera del Masters 1000 de Madrid. Sobre el polémico clay azul, Nadal cayó ante su compatriota Verdaso 3-6 6-3 5-7 y dijo chao a un torneo donde la gente, según el propio Nadal, lo trata muy bien y donde se siente muy augusto. Lamentablemente el ambiente de Nadal se vio alterado con una superficie a la cual no se pudo adaptar y que terminó por sacar al número dos del mundo de los cuartos de final. Y la polémica sigue, porque ahora el mismo Rafael Nadal ha declarado que no volverá a Madrid mientras siga con la “alfombra azul”. Es decir, el siguiente año Madrid tendría que elegir entre el clay azul o la participación de Rafael Nadal, el jugador más dominante que tiene el tenis sobre el clay. La reacción de Nadal, sumada a muchas otras de los mejores jugadores del mundo, simplemente son quejas contra una idea que busca como objetivo la comodidad del espectador, olvidándose de la comodidad del tenista, quién es en última instancia, el que da el espectáculo. Pero, ¿por qué la arcilla azul es tan odiada y criticada por los tenistas? Madrid es el “benjamín” de los Masters sobre tierra batida, pero sin duda es uno de los torneos que explota más la publicidad y el marketing. La nueva y revolucionaria idea de Madrid para este año fue convertir el clásico “polvo de ladrillo” anaranjado a azul. El creador de esta idea es el rumano Ion Tiriac. Su palabra favorita del ex jugador de tenis y también importante hombre de negocios es la “innovación” y vaya que lo ha hecho en Madrid. Hace 3 años se creó “La Caja Mágica”, una estructura que tenía estadios semicubiertos, lo que permite cerrarse cuando hay lluvia (gran idea para Wimbledon, pero ustedes saben, la tradición). Pero volvamos al tema central. La arcilla azul es la novedad y el punto de discordia entre los jugadores y la organización del evento. Muchos tenistas se han quejado de la cancha. El pique de la pelota, el desplazamiento en el terreno y la sensación al parecer para ellos no es la misma que la del clay anaranjado. Y siendo ellos los protagonistas se debería prestar más atención al asunto. Tiriac propuso la idea del clay azul con la finalidad (y quizás la única) de dar al espectador una mejor visión del juego. Para los que vemos tenis en una pista de polvo de ladrillo es un tanto difícil distinguir la pelota, pero en la “alfombra azul” de Madrid esa dificultad no existe y pasamos a disfrutar de los partidos. Pero acá viene el problema, porque la idea innovadora no pensó en los tenistas. La idea se lanzó y los organizadores no se tomaron la molestia de consultar ni avisar a los jugadores. En realidad con Nadal fuera del Consejo de Jugadores, la ATP pudo lograr que Madrid tenga su “alfombra azul” en esta edición. Desde ese momento Nadal fue el principal oposito a la nueva apariencia del Masters español. Al final lo pudieron convencer de jugar, pero eso parece que quedó atrás luego de su eliminación el último jueves. Por el lado de los tenistas, los más escuchados son los Top del ranking y ellos han sido muy claros en que no les gusta la superficie. Jugadores como Djokovic, Tipsarevic, Raonic y el propio Nadal son quizás los que han sido más directos en mostrar su incomodidad. Aunque se trate de una cuestión de gustos o verdaderos riesgos para los tenistas (muchos acusan que se complica el desplazamiento en la cancha), lo cierto es que los protagonistas tienen que sentirse a gusto para que nos puedan regalar un gran espectáculo. El tenis es eso, espectáculo de talento y físico combinados. La idea de Tiriac por hacer un torneo más popular y rentable para los bolsillos de la ATP y del propio rumano parece que ha llegado a un límite con el choque contra el jugador más dominante del “polvo de ladrillo”. ¿Creen que Madrid pierda ingresos con la no inclusión de Nadal en el cuadro? El torneo se ha caracterizado por mostrar novedades, muchas de las cuales han tenido repercusiones, polémicas y protestas. Sin duda pierdes cuando no tienes a un top ten, y sobretodo cuando no es por una lesión de último momento o algo parecido, sino que la ausencia se conoce una edición antes. Por otro lado, todo pasa por el español. Si Nadal necesita puntos el próximo año (la principal razón de por qué el español jugó este año), ¿Podrá pisar nuevamente el clay azul? Solo el tiempo lo dirá. Recordemos que en su momento Roger Federer criticó el “Hawk Eye” (Ojo de halcón). No será la primera ni la última vez que un jugador de élite tenga discrepancias con ciertas novedades o cambios en los torneos de la ATP