La alta costura hecha perfume

Desde la pasada semana el perfume del diseñador libanés, Elie Saab ocupa un lugar importante en mi tocador, la joya de la corona. 

Lo primero que impresiona del perfume es su frasco de vidrio, de líneas puras, que deja ver el gusto por la arquitectura y el diseño del modisto. Simplemente maravilloso. La creadora del recipiente, Silvie de Francese ha querido reflejar la pasión del genio de la costura por la luz. Arquitectura y joyería.
En cuanto a su interior que decirles, pues que se trata de una fragancia de alta costura, nunca mejor dicho, como el trabajo por el que es tan reconocido a nivel mundial Elie Saab. Es un agua de perfume que rinde homenaje al universo del modista no sólo en sus modelos de la alta costura sino en sus glamurosas colecciones de prèt-á-porter. El perfumista Francis Kurkdillian ha utilizado para crear esta fragancia pétalos de flores de azahar, las cualidades más exquisitas del jazmín, enriquecido con un acorde amaderado de cedro y notas adictivas de miel de rosa.Una joyita que todas deberíamos tener, eso sí, para usar en momentos especiales. ¡No es un agua de colonia!