La belleza de las simples cosas

A pesar de mi forma de ser…rebelde, critico de mí mismo, un poco alocado y temerario, he logrado obtener un tesoro que muchos buscan y pocos encuentran… Soy feliz.

Puede parecer algo común e intrascendente para muchos, pero para mi es algo muy importante.
Si bien, son “momentos de felicidad” esa condición de efímero no le quita valor. El mérito radica en saber apreciar lo bello de las simples cosas. Esto significa que mi felicidad perdura en el tiempo, ya que las cosas simples están a mi alcance a cada paso que doy.El simple hecho de despertar cada mañana y abrir los ojos al nuevo día ya es el primer instante de felicidad.Dar el primer paso y sentirme vivo es otro motivo para ser feliz.
Poder salir a enfrentar la vida y vencer escollos es otra de las sensaciones felices. Es la alegría de sentirnos fuertes de espíritu.El primer “hola…buen día” señala mi existencia. Es como si dijera:
“Aquí estoy, soy yo, me importas y por eso te saludo, soy feliz de poder hablar…de poder expresarme y decirte lo importante que eres en mi vida.”El día transcurre, las sensaciones son variadas, lo simple y bello nos sale al encuentro a cada momento. Lo importante es darse cuenta de ello y apreciarlo para ser felices.No es difícil, solo hay que desprenderse de todo sentimiento negativo, odios y rencores, envidias, avaricia…miedos.
Los miedos son como una venda que tapan los ojos e impiden ver y apreciar lo bello de las simples cosas.Yo los he vencido y soy feliz de poder expresar en estas líneas lo que siento