La cúpula, de Stephen King

La cúpula
(Under the Dome)
de Stephen King

Un tranquilo día de otoño la ciudad de Chester’s Mill queda inexplicable y repentinamente aislada del resto del mundo por un campo de fuerza invisible. Los aviones se estrellan y caen del cielo consumiéndose entre llamas, la gente corre sin rumbo por el pueblo vecino al verse separada de sus familias y los coches estallan al impactar contra el muro invisible. 

Nadie consigue comprender cuál es la naturaleza de la barrera, ni su procedencia, ni cómo ha llegado hasta allí, ni si algún día desaparecerá. Dale Barbara, un desilusionado veterano de la guerra del Golfo reconvertido en un mediocre cocinero; Julia Shumway, la directora del periódico local; y un grupo de skateboarders adolescentes lucharán para descubrir el misterio de la cúpula. 

Sin embargo, en el otro bando se encuentran el gran Jim Rennie, alcalde de Chester’s Mill, un hombre corrupto y sin escrúpulos dispuesto a todo para tomar las riendas del poder, y su hijo, que oculta un terrible secreto en una oscura despensa. Pero su adversario principal es la propia cúpula. Porque el tiempo no es infinito. El tiempo corre e irremediablemente se acaba...

Tras haberme saturado de él en su época, hace unos meses volví a encontrarme con Stephen King tras muchos años de haber permanecido alejado de él voluntariamente. Comencé con 22/11/63, que me apetecía desde hacía mucho, y después seguí con una relectura de Carrie que tenía pendiente desde hacía años. La siguiente ha sido La cúpula... y aunque me ha gustado, también me ha decepcionado ligeramente. 
Mi principal problema con esta novela ha sido su ritmo: se me ha hecho excesivamente lento. Y sí, Stephen King tiende a excederse y lo veo como un rasgo más del autor, pero en esta ocasión las 1200 páginas de la novela se me han hecho un tanto pesadas. Quizás parte del problema sea mío: comencé a leerme la novela antes de las navidades, y después me vi obligado a parar al irme de vacaciones y me costó mucho volver a ponerme con el libro y volver a meterme en la historia. Aun así, antes del parón ya se me estaba haciendo algo pesada.
Mi segundo problema con el libro fue que se me hizo predecible: prácticamente desde el principio ya sabía cuál sería el final y el misterio de la cúpula. Y eso en una novela de 1200 páginas molesta un poco. Realmente no considero que sea culpa del autor, pues no hay nada en la novela que indique lo que pasa realmente (al menos no al principio), pero no sé... me di cuenta del final casi al principio, y me decepcionó un poco que se tratara de lo que yo había pensado.
¿Significa esto que La cúpula sea una mala novela? No. De hecho, es una muy buena novela, aunque para mi gusto su excesiva longitud le quita algo de fuerza. Afortunadamente, Stephen King hace gala de su capacidad casi sobrenatural para perfilar personajes, y nos ofrece una novela muy al estilo de La tienda, con personajes perfectamente caracterizados y creíbles que funcionan a la perfección dentro de la novela. Lo malo es que entre este abanico tan amplio no me he encontrado con ninguno especialmente memorable ni que me emocionara especialmente, como sí me ha sucedido con muchas de sus novelas. Al menos, esto no significa que el resto sean malos.
Otro de los puntos positivos de la novela es, como no podía ser menos, el estilo del autor. Llevo casi media vida leyéndole, aunque no asiduamente, y todavía no sé describir esa capacidad que tiene para escribir, ese estilo tan personal y tan inconfundible del que impregna cada obra y hace que leerle sea siempre un auténtico placer, sea la historia que sea.
La cúpula no es lo mejor que Stephen King puede ofrecer. Eso en cualquier otro autor podría significar que es una novela mediocre, pero, tratándose de quien se trata, por suerte no es así. Simplemente no es la novela que más recomendaría del autor si alguien quisiera iniciarse en él, pero sí a quienes ya hayan disfrutado de muchas otras novelas suyas... y tengan mucho tiempo, claro está. 
Historia:
Personajes:
Estilo:
Ritmo:
Opinión:

Lo mejor:El punto de partida de la historia.
Lo peor: La longitud excesiva. Te gustará si... estás familiarizado con la obra del autor.