La Democracia en Egipto.

Publicado el 22 septiembre 2013 por Kiriki
Tantas formas hay de entender la democracia como de aplicarla. En Egipto hubo una primera revolución popular en 2011 que quiso quitar a un rais que llevaba tres décadas en el poder y, después de cobrarse el proceso numerosas víctimas, consiguió algo que perseguía: unas elecciones libres y democráticas.
Lo que sucedió en las semanas anteriores a las presidenciales muchos lo sabemos de primera mano: negociación de Khairat al Shater con la SCAF, patada en el culo a los observatorios internacionales para que salieran del país, compra de votos por dinero en efectivo y recargas de móvil,... Lo sucedido una vez la gente ya había votado también lo conocemos muchos: retraso de semanas en la presentación de los resultados, nula explicación de los increiblemente numerosos votos nulos,... Llegó el día del anuncio del presidente electo y, con sorpresa para la Guardia Republicana, el vencedor fue Mohamed Morsi: el perdedor en los comicios ante Ahmed Shafiq.
Una vez Morsi presidente la democracia en Egipto desapareció de la política. De manera fulminante. La política desarrollada por Mohamed Morsi y por el Partido Libertad y Justicia, inclinados como un chino agradecido ante la ONG Hermanos Musulmanes, no se ajustaba a ninguna de las denominaciones que la palabra democracia ofrece. Salvando las diferencias Morsi pare un régimen basado en el autoritarismo y en la autocracia y en condiciones similares como el que aupó a Adolf  Hitler en Alemania en 1933: problemas sociales, propaganda y concentración de masas. Ambos -líder aclamado el alemán, desconocido títere el egipcio- llegaron al poder mediante sufragio universal e instauraron una partitocracia por la vía de la oclocracia (ver wiki para aclaraciones).
La siguiente demostración democrática en la tierra de los faraones tuvo que esperar exactamente un año; cuando la ciudadanía se echó a las calles harta de ver cómo se hundía el país y ellos con él. Una vez que la ciudadanía, por la excepcionalidad del hecho, suma al ejército a su favor desde el "islamismo político" se empieza a hablar de golpe contra la democracia y empiezan a surgir apoyos externos e internos: una corriente a favor de los islamistas por parte de países, prensa y redes sociales por causa de un mal entendido golpe de estado -esto lo achaco en parte a que los servicios de información de los países representados en suelo egipcio (que cuestan un cojón de mico al año, al menos los españoles) estarían en otras cuitas (lúdicas tal vez) porque, por lo visto, no se enteraron de qué iba la vaina y no pudieron poner al día a sus respectivos gobiernos ni en tiempo ni en forma.
Como de los apoyos de países y prensa ya se ha escrito suficiente me centraré en las redes sociales. Desde el comienzo de la revolución de 2013 han proliferado grupos de apoyo a los Hermanos Musulmanes en todas las redes; desde el microblogging, pasando por Facebook hasta canales YouTube. Si alguna ha tenido alguna ventaja ha sido el microblog porque en 140 caracteres, sabiendo juntar bien las palabras, puedes ofrecer algo razonablemente creíble. Sobre las otras dos opciones, Facebook o YouTube, se podría decir que los seguidores islamistas han fracasado en sus exposiciones excepto los oclócratas que son abrumadora mayoría; los que aún creen que el Partido Libertad y Justicia y los Hermanos Musulmanes barajaban, en algún momento, la democracia dentro de su código (ayer mismo un especialista en efectos especiales hablaba en la cadena Dream de cómo los HHMM le pagaban para que preparara y grabara falsos ataques del ejército para hacerlos correr vía link por las redes sociales después de pasar por YouTube).
Entre los que aún creen en la democracia islamista hay en Facebook un grupo que me ha llamado mucho la atención: La Democracia en Egipto.
Es un grupo creado en España y con el siguiente objetivo: "estudiar, debatir, proponer y publicar unas soluciones democráticas para los problemas de Egipto". Parece que se hacen presentar como un grupo de expertos sociológicos porque a lo anterior añaden: "La democracia y la libertad son las guías de nuestro trabajo". A renglón seguido dicen que su grupo " no aceptará publicaciones que contengan publicidad de otros grupos, partidos políticos, asociaciones, etc". A partir de aquí la democracia ya se está jodiendo porque solo aceptan lo que ellos proponen y bajo una aparente y visible buena voluntad rematan: "La incitación al odio, discriminación, injusticia, racismo, xenofobia, desprecio a las personas, culturas, etc no serán bienvenidas". Con unos huevos colganderos más gordos que el caballo de Espartero uno de los administradores (el creador del grupo) tiene fijado lo siguiente en el muro: "Los administradores de este grupo queremos llamar la atención de todas y todos los miembros (falta miembras) que el objetivo de este grupo es defender la libertad y la democracia en Egipto y en cualquier lugar del mundo. Este no es un espacio para justificar un golpe de Estado ni para hacer apología del terrorismo ni a la dictadura. Lo demás sobra..."
El resultado de acercarte a echarles una mano como demócrata es o que no te admitan porque ya saben quién eres -mi caso- o la expulsión automática del grupo porque saben que no dices lo que quieren oir, porque saben que no compartes sus argumentos, porque saben que no eres R4BIA, porque, en definitiva, ni son demócratas ni intención tienen de serlo.
Me refiero a este grupo porque escriben en castellano, como yo, aunque intercalen el árabe puntualmente pero grupos de este calado los hay a cientos; solo lo he tomado como ejemplo.
Yo, desde aquí, solo les puedo decir lo siguiente, a este grupo y a los de su cuerda: si quiero hacerme una paja (mental o física) no hace falta ni que me digas cómo ni que me prestes ayuda (yo mando: La Democracia en Egipto, o la satisfacción compartida al modo José Luis Torrente). Si me quieres explicar nuevas técnicas, agradecido quedo (abierto a ideas: Los dados del Kiriki y un largo etcétera). Y, como aquí no se censura, si quieren pueden venir a este blog a exponer sus argumentos. Serán bienvenidos.
Fórmula de las religiones.