Una de las últimas falsas filosofías que intentan amortiguar la mala conciencia por ser un cabrón sin escrúpulos, ha sido la del objetivismo. De todas con las que me tropecé, creo que es la peor construida, y la más estúpida, ademas. Lo malo es que tengo algún conocido randiano, y de vez en cuando tendré que oír esas machaconas y mongólicas teórias.
Todo lo que pueda decir para ciscarme en esta pseudoescritora, y en sus delirantes teorías, dignas de un psicópata de película, ya lo ha dicho en el 2012 el blogger de Vicisitud y sordidez, cuyo enlace a su completo artículo tenéis a continuación. Sólo deciros, que si os encontraís con un randiano, cambiad de acera, no sea que os muerda, y la gilipollez sea contagiosa.
Vicisitud y sordidez: Ayn Rand