La fotografía si es un arte

La famosa foto normal sin retoque se ha dejado ver en el actual panorama fotográfico y se atrevió con la apuesta mas revolucionaria hasta el momento, después de una imagen publica tan Photosheada.Las chicas de curvas vertiginosas muestran ya desde hace un tiempo una imagen diferente a la acostumbrada idea de cuerpo porcelanita debido a los acostumbrados retoques digitales. El retrato difundido muestra interés porque es una imagen estudiada para parecer casual. Una postura que resalta su figura con un encuadre a contraluz para disimular imperfecciones. Puede considerarse como la imagen sin ordenadores entre la cámara y el medio de difusión, el estilo de fotografiá de hace una década. En torno al comienzo del 2000 las cámaras digitales lograron captar imágenes nos mostraban escenas captadas y reproducidas a toda página en revistas de moda. Los fotógrafos contábamos con un tiempo para tomar la foto, iluminación, encuadre, utilizar el color o el blanco y negro, el maquillaje y capacidad de improvisación para mostrar al público que veía nuestro trabajo. La aparición del llamado efecto retoque de Photoshop ha supuesto para muchos de nosotros que lo importante de la foto es el píxel, y no la luz. Practicar el efecto composición y agrado visual fotográfico no implica el tener que manipular la textura de la imagen como algo digital mente perfecto. De esta forma la fotografía actual es un mero engaño publicitario para llegar al gran publico bien sea condensado en cremas y cosméticos variados o vendernos una imagen danonificada de nuestro cuerpo, no cabe duda que sin el famoso retoque de photoshop ayuda a vender esa idea. Eso lleva amarrada la idea que el buen fotógrafo es que muestra mas estilizada la imagen, bien sea corporal o facial. La profesión se prostituye a favor de la imagen, con la consentida autorización del profesional que prefiere cambiar la composición, luz, gusto y estilo por una imagen menos costosa de conseguir aunque posteriormente de mas tiempo en el procesado, al contrario que antes que se utilizaba tiempo en componer y cuidar los detalles de esa imagen que se difundiría mas tarde. Llevamos la fotografía a un nivel de ilusionismo y fantasía de tal manera que se pierde entre lo real y lo inimaginable, perdiendo esa formula del profesional que realmente sabe de su trabajo y adaptando la mala calidad del fotógrafo actual, que en la mayoría de las grandes empresas del mundo fotográfico no es ni el mismo que retoca la imagen.La realidad es que hoy los medios, cámaras, focos, estilistas, creadores de imagen hacen que cualquier persona con una digital sea un buen fotógrafo, con su afamado estilo porcelanita. Donde nos lleva este camino, sencillamente a trabajar nosotros también ese estilo porcelanita y artificial de una imagen irreal, fantasma sin gusto ni estilo personal, acabando en una creación de un grupo de asesores de imagen “algo que hoy se estudia tanto”. A muchos me gustaría verlos cámara en mano tomando una foto en la berrea o componiendo ese paisaje Cántabro que tan acostumbrado nos tiene Cantabria en Fotografías y sus componentes. Desde aquí apelo a la cordura fotográfica, a respetar a esos profesionales que se ganan la vida diariamente con su cámara y su esfuerzo tan poco recompensado, a formarse como fotógrafos bien sean aficionados como yo, que no vivo de ello como a los grandes artistas que tiene este país detrás de cada mostrador de esa tienda de fotos de la esquina de nuestro barrio. Bien es cierto que la fotografía es un Arte, pero es nuestro Arte, el de cada uno el que nos identifica como artistas. joseortega.