La iglesia farisea

No me produce más que asco los acontecimientos,  que,  como un pequeño manantial no paran de brotar de la iglesia. Es vergonzoso que a una maestra de religión el mero de hecho de tener una relación sentimental con un hombre casado, haga que el estamento eclesiástico la sancione de por vida. En cambio a toda manada de abusadores de niños, tanto curas, obispos, cardenales y demás tropa enferma,  se les invite a cambiar de parroquia, de iglesia, de catedral, etc.,  es simplemente un insulto a la especie humana, me dan ganas de auto expulsarme de este planeta. También me hace mucha gracia ver las procesiones,  como la alta alcurnia va delante con sus mujeres, sus mantillas y el pueblo absorto en su estupidez. Analizar también a esos padres que llevan a los niños a ver un señor crucificado, ¿eso es bueno para un niño?  La bondad no está en rezar, en comulgar, en ir a la iglesia, la bondad está muy lejos de allí ¡Cómo podemos permitir esto!