A través del twitter hoy nos hemos enterado de una noticia que nos ha dejado con la boca abierta. Y es que la CEE (Conferencia Episcopal Española), ha decido hacer una limpieza de contenidos inapropiados en la parrilla televisiva de los canales públicos (los de RTVE y los autonómicos). Para ello ha denunciado que hay ciertas series, películas y secciones que atentan contra la fe católica, “al no respetar y confundir al pueblo católico con mensajes inapropiados y tergiversados sobre la fe que profesamos…”, según señala D. Juan María Buenavista López (responsable de Comunicación Audiovisual de la CEE).
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Pero ahora viene lo mas curioso, una de las series de la que han pedido su retirada es… Medico de Familia (¡¡tachaaaaaaaaan!!). La CEE considera que atenta contra la familia católica al promover el incesto entre familiares directos (se lían los cuñados), al no respetar a las personas mayores (al abuelo cascarrabias que le hacen mil perrerías), al permitir el libertinaje (la hija mayor todo el día de picos pardos con unos y con otros) y la vaguería adolescente (el Chechu que es un cazurro y no aprueba ni una). Lo único que ven decente desde la CEE, es que las familias tengan sirvientes provenientes del medio rural, eso sí, tratando a los señores desde el respeto y la total discreción, que la Juani ya parece una mas de la familia… Llegan a comparar la serie con una película de Almodóvar.
También se pide a los responsables de estos medios que vigilen los guiones de sus programas, para que la palabra Dios sea tratada con respeto y que en los guiones y pantallas aparezca con la “d” en mayúscula, así como al pronunciarla se haga con un tono alto y firme, nada de chascarrillos ni muecas al decir La Palabra.
Y luego se hacen una serie de recomendaciones para mejorar la programación, como que la misa de los domingos por la mañana en La2, se emita en 4:3 porque con los 16:9 actuales se corta la parte de arriba de la cruz que hay en el altar mayor, faltando el respecto al símbolo que representa las bases del catequismo cristiano. Así como que la información sobre las manifestaciones en las que participa la iglesia, el número de asistentes y lemas paseados, sean los que proporciona el responsable de comunicación de la CEE y no lo que digan las delegaciones de gobierno o la policía, que son organismos corrompidos por el mal que reina ahora mismo en la sociedad.
Por último se agradece que estas medidas sean llevadas a la práctica a la mayor brevedad posible, si no puede que denunciemos a su cadena y entonces el Apocalipsis se empleará con toda su dureza sobre su cadena y familiares. ¡Con la iglesia hemos topado!.