Hoy recibo una historia en mi facebook de una de esas páginas a las que estoy suscrito. Muchas veces seguimos el dia a dia olvidándonos que para nuestros mayores el tiempo pasa más rápido. Y un mal día algún problema de salud nos hace reflexionar acerca de si les hemos dedicado o no todo el tiempo que se merecen, todo el que podemos... Esta es la historia que copio y pego:
Tengo la impresión que es algo que nos ha pasado a casi todos. Perdí a mi padre ya hace 15 años y no hay día que no tenga a mi madre en la mente...Intento hablar con ella casi todos los días, incluso le escribo algún que otro poema, ( Ya publiqué "Madre no hay más que una") o este otro que escribí no hace mucho: LA MÁS ELEGANTE
me regalaste la vida de forma premeditaday nunca me ha faltado tú calor.Si me duele no dejas de sufrir con mi dolor,y a cambio no te he dado casi nada,pues disfruté mi mocedad con tantas ganas,que no dejé de ser tu admiradoraunque me solté muy pronto de tu falda.No me olvidé un sólo instante de tu amor,da igual que fuera noche que mañana.Aún así hoy quiero felicitarte,regalarte versos de reconocimientoy manifestar públicamente lo que siento.Tú eres uno de mis baluartes,no conozco nadie con quién equiparartey admiro tu temperamento.Soy el resultado de lo que tú me enseñastede tus puros y bellos sentimientospor dentro y por fuera siempre elegante.
R.C. Pero siempre me queda la sensación de que no le digo nunca todo lo que la amo, como a mi otro amor...No hay para mí nada más importante que ellas y desde aquí les digo que las amo más que a mi vida.