La historia viene a ser la siguiente, tenemos cuatro profesionales que trabajan para una agencia de marketing "de guerrilla", marketing furtivo, vecinal, lo que en la versión original llaman "self marketing". Y es que ellos, con sólo relacionarse socialmente, dejan ver a su entorno qué productos utilizan y cuáles son los beneficios funcionales y emocionales de los mismos, así consiguen aumentar los porcentajes de ventas en la región donde se integran estos "núcleos familiares":
"Vendemos un estilo de vida, una actitud. Antes eras vendedor y la gente confiaba en ti. Si les gustas, si te quieren a ti, quieren lo que tú tienes".
Cada uno de los miembros de la familia tiene sus propias estrategias de venta y sus públicos objetivos bien definidos, en algunos casos actúan en grupo -vacaciones en familia- y otras se focalizan según el segmento -el padre muestra sus palos de golf, la madre sus productos cosméticos...-. De hecho Steve (el padre) se basa en algunas de las tácticas reflejadas en uno de mis libros favoritos, How to Influence, de Jo Owen: si no eres lo suficientemente influyente para convencer a alguien, acércate a quien sí tiene poder. Cuando un determinado target aún no confía lo suficiente en él como para que sus recomendaciones y estilo de vida vendan por sí mismos... Otra de las estrategias que aparece en la película es el reposicionamiento de una marca: ponche de ron en polvo. Lo que a priori podría parecer
Estos "relaciones públicas" de las marcas también tienen sus principios y en ocasiones reticencias porque se venden por dinero mientras se justifican con un "unimos grandes productos con la gente que los quiere y no lo sabe".
¿Y por qué la familia Jones? "Keeping up with the Joneses" es un latiguillo del inglés que hace referencia a la comparación con el vecino de al lado como una marca para la clase social o la acumulación de bienes materiales. "To fail to keep up with the Joneses" se percibe como la demostración de inferioridad cultural o socio-económica.
Pues eso, ¡merece la pena echarle un vistazo!