Viendo la serie "Touch", una voz en off, decía algo de un viejo proverbio o leyenda japonesa que se me quedó grabada y me hizo pensar....pero pensar en bonito.... ...me hizo creer en esa frase, es más, me dí cuenta de que siempre, hasta antes de conocerlo, ya creía en lo que expresa.....
Literalmente, cuenta que .... «Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias. El hilo se puede estirar o contraer, pero nunca romper».....
Viene a cuento escuchar esta "coplilla dulce"....
Creo que el corazón está compuesto de habitáculos, de miles de ellos, unos más grandes, otros más pequeños, que van alojando olores, sabores, recuerdos, viajes, experiencias y sobre todo personas, que se alojan en ellos y no salen nunca, dejando su marca, su esencia propia en cada rincón y .................que por más que quieras y aunque intentes realojar a otra persona en ese mismo hueco de donde has querido desprenderte de alguien, esta, no podrá, materialmente nunca, ocupar ese lugar......
Ese hilo rojo, lo puedes estirar, ayudándote de distancia, de tiempo...., pero nunca, nunca, lo podrás romper.... y la verdad, es que hoy pienso que me alegro de ello, creo que todos somos el resultado de las esencias de todos nuestros inquilinos... Sed felices, no usad tijeras...., no sirven de nada....
MIles