Para ser sinceros, dábamos por hecho que no querría hacerlo; pero, aún así, decidimos intentarlo. El escuchaba en silencio, supongo que alucinado por todas aquellas explicaciones que le habían caído de sopetón y sin poder hacer nada para evitarlo. Y mientras hablaba, yo pensaba... ¨debe estar buscando una forma educada de decir no¨. Sin embargo, después de unos segundos de silencio, me propuso un trato: ¨voy dentro de dos semanas a Ruiloba, a pasar unos días. Os ofrezco lo siguiente: me enviáis el borrador del trabajo; lo leo. Si me gusta, lo presentaré y no cobraré nada; si no creo oportuno presentarlo, os lo diré¨. Me sorprendió la respuesta, aunque pensé que no volveríamos a saber nada de él. Se lo enviamos.
La llamada y Alfonso Ussía
Publicado el 09 enero 2012 por BeatrizbeneitezPara ser sinceros, dábamos por hecho que no querría hacerlo; pero, aún así, decidimos intentarlo. El escuchaba en silencio, supongo que alucinado por todas aquellas explicaciones que le habían caído de sopetón y sin poder hacer nada para evitarlo. Y mientras hablaba, yo pensaba... ¨debe estar buscando una forma educada de decir no¨. Sin embargo, después de unos segundos de silencio, me propuso un trato: ¨voy dentro de dos semanas a Ruiloba, a pasar unos días. Os ofrezco lo siguiente: me enviáis el borrador del trabajo; lo leo. Si me gusta, lo presentaré y no cobraré nada; si no creo oportuno presentarlo, os lo diré¨. Me sorprendió la respuesta, aunque pensé que no volveríamos a saber nada de él. Se lo enviamos.