LA MALDICIÓN DE LOS REINOSEryaAyaxia Ediciones230 páginas...

Publicado el 28 abril 2020 por Anuca @ideaspalabras
LA MALDICIÓN DE LOS REINOS
Erya
Ayaxia Ediciones
230 páginas
#prenda221
Una rosa. Un cetro.
Un palacio. Un océano.
Una maldición. Un castigo.
Un solo destino.
¿Y si la sirena hubiera nadado al castillo de la bestia?

Adoro los retellings, reversionar los cuentos clásicos tiene su atractivo y nos ofrece nuevas reinterpretaciones y giros que les dan frescura, nuevo interés, modernidad...
Así que era de esperar que este que nos trae Erya cayera en mis manos. Hacía unos meses que dormía en mi Kindle esperando el ansiado beso de amor que lo despertara de su letargo, ese beso llegó de la boca de Olor a libro nuevo y su lectura conjunta. 
Y lo que parecía consitir en un entretejido de La bella y la bestia y La sirenita,  resultó ser un entramado que da cabida a múltiples personajes y objetos simbólicos de otros cuentos igualmente conocidos. Sin duda, este es el punto fuerte de esta historia, al menos en mi opinión. 
Despertar a esta lectura supuso asumir un estilo narrativo en el que el diálogo escasea, simulando un cuento que quiere ser un guiño a los clásicos, estilo que se lee ágilmente y que luce francamente bien con el tipo de historia que se quiere contar. Una historia que, además, tiene un broche final en forma de epílogo en el que Erya comparte con el lector curiosidades muy bonitas, haciendo del cierre una experiencia muy agradable.
La bestia sufre una maldición pero, a diferencia de la historia original, tiene un pasado del que hacernos partícipes, una infancia y una educación, una vida anterior y un tormento presente. Aneris, es la sirena que acaba en el castillo de la bestia con un par de piernas (el cómo llega allí y en ese estado, mejor lo descubrís vosotros). No ansía la vida humana del mismo modo que la original, pero sí se muestra como una criatura marina con inquietudes y curiosidad por lo desconocido que la lleva a descubrir un mundo y un amor con los que no contaba. Y en torno a ellos, Caperucita, la bruja del Mago de Oz, alguna que otra hada madrina... y no seguiré citando porque ir descubriendo durante la lectura los cameos que hay es una gozada. ¿Cómo pueden aparecer y empastar bien con la historia?, esa es la gracia de este retelling, esa es la virtud que Erya ha volcado en esta novela.
Sí, hay mucho hilo que entretejer, pero no he tenido la sensación de que quedaran cabos sueltos. A lo largo de los capítulos, pero especialmente en la última parte, se va atando todo lo que podemos sentir colgando y si algo no está explicado, sinceramente, mi mente ha sabido suplir esa falta de información sin apenas darse cuenta. 
Como novela de fantasía también tiene un worldbuilding, y aunque parte le viene dado por los clásicos en los que se sustenta esta historia, no podemos quitar mérito a todos los reinos creados para construir esta nueva realidad. Eso sí, no se detalla en exceso, tal vez nos quedemos con ganas de conocer más a fondo algunos parajes y descubrir el porqué de sus características, pero lo cierto es que esa pequeña falta de detalle no interfiere en la lectura y poco en la satisfacción.
No os voy a engañar, he disfrutado de esta historia, aunque la habría disfrutado aún más si la relación entre la bestia (también conocido como príncipe Adrien) y Aneris hubiera estado más desarrollada. Llamadme romántica pero... cuando hay romance y es del que marca la diferencia por alguna razón y sostiene en parte el tronco de la novela, me gusta que me llegue, que cale, que me haga sentir con los protagonistas, y en este caso la pareja me ha fallado un poquito.
¿Alguna vez se os había pasado por la cabeza qué pasaría si la sirenita se hubiera enamorado de Bestia? ¿No? Pero, ¿os gustaría pensar que es posible y os preguntáis cómo sería? La maldición de los reinos puede ser tu novela.