El eje de la muestra era el conjunto de paisajes de su tierra natal Yorkshire realizadas a partir de 2004. La mayor parte de las obras se componían de un camino en perspectiva y de una vegetación exuberante con predominancia de los verdes. Los colores eran intensos y complementarios y los trazos vigorosos y firmes recordaban un tanto a Van Gogh. La sensación del espectador era la de viajar en un coche a través de los bosques ingleses contemplando los colores del invierno y la llegada de la primavera.
Llamó mucho mi atención la cantidad de diferentes técnicas utilizadas por el artista para realizar un estudio del paisaje de Yorkshire. De hecho, una parte de la exposición se componía de dibujos realizados con el I-Pad usando la aplicación Brushes. El uso de esta tecnología le permitía pintar a "plein air" y coger apuntes de manera inmediata.
Hockney ha sido siempre un fanático del uso de la tecnología en el arte, bien conocemos la afición de los hombres por buscar cualquier escusa para comprar la última tecnología jeje Una de las mejores partes de la exposición exhibía trabajos de los años ochenta donde Hockney experimentó con la fotografía para componer collages recreando paisajes americanos.Una pieza fundamental de esta parte es Pearlblossom Highway, aquí el espectador acercándose a la obra se podía recrear en los detalles de cada fotografía, mientras al alejarse percibía la unidad del paisaje. La fragmentación de los objetos transmitía la sensación de movimiento hacia el punto de fuga. Sin duda una composición remarcable que os invito a visitar con mayor detalle en la web del Guggenheim.
Pearblossom Highway, 11-18 April 1986
En general Hockney me ha parecido un artista sorprendente, y no podía ser otra cosa que uno de los artistas ingleses mejor reconocidos. Combina tradición y modernidad en técnicas, temas y estilos.Winter Timber, 2009
Simplemente el Guggenheim no podía fallar con un artista así.