(A Clockwork Orange)
de Anthony Burgess
La naranja mecánica es tan brillante, transgresora e influyente hoy como cuando fue publicada por primera vez, hace ahora cincuenta años. Una horripilante visión del futuro escrita en su fantástico lenguaje inventado que se convirtió en un clásico de la literatura moderna, así como en la base para la polémica película de Stanley Kubrick. El nadsat Alex y sus tres drugos viven en un mundo de crueldad y destrucción. Alex tiene los principales atributos humanos: amor a la agresión, amor al lenguaje, amor a la belleza. Pero es joven y no ha entendido aún la verdadera importancia de la libertad, la que disfruta de un modo violento. En cierto sentido vive en el Edén, y sólo cuando cae parece capaz de llegar a transformarse en un verdadero ser humano.
Tengo que decir que en general el lenguaje me ha gustado, pero es la principal razón por las que no recomendaría esta novela a casi nadie. Es literalmente imposible leer más de dos o tres páginas y comprenderlo todo si no conoces el ruso, aunque por suerte al final del libro hay un glosario de este lenguaje (que yo mismo he tenido que consultar en más de una ocasión, todo hay que decirlo). Me imagino que muchas cosas se pueden adivinar por el contexto, pero aun así creo que tiene que ser muy duro leer este libro sin saber ruso.
Por otro lado, los personajes sí que me han gustado bastante. Es cierto que apenas se conoce a los secundarioos, pero Alex me ha encantado. Es difícil encontrar un personaje tan retorcido y que el autor logre meterte en su mente completamente, pero aquí Anthony Burgess lo ha conseguido. Y en esta ocasión sí que es cierto que el lenguaje ayuda a potenciar su caracterización.
En definitiva, no sabría si recomendar o no esta novela, pues a mí ya me costó bastante decidir qué puntuación ponerle. Lo que sí me gustaría es que, si la habéis leído, me dijerais qué os ha parecido. ¿Coincidís conmigo? ¿Os encantó? ¿Lo odiasteis? ¡Siento muchísima curiosidad!
Historia:
Ritmo:
Lo mejor:Alex.
Lo peor: La historia está muy desaprovechada.