Tras la decisión de la comisión de DDHH de la ONU de 'investigar los posibles crímenes de guerra de Israel en Gaza', entrevistamos a la secretaria de la comisión, la sudafricana Navi Pillay.
La investigación fué aprobada por 29 votos, todos de países árabes y musulmanes, más China, Rusia, Cuba y Venezuela.
Le consultamos a Pillay si no le parecía un poco extraño que China y Cuba, como ejemplos, votaran en la comisión de DDHH, contestó: 'No, en absoluto. Cuando se trata de castigar los crímenes del Estado Sionista genocida todo vale'.
Decidimos seguir adelante y le preguntamos por qué su comisión no ha comenzado investigaciones de crímenes de guerra en Ucrania, en Siria, en Irak, en Sudán, nos explicó: 'Es muy simple. Es esas guerras no participan judíos. Es cierto que hay en ellas unas masacres tremendas, miles de muertos y millones de refugiados, pero lamentablemente no se puede culpar a ningún judío por ellas. Por lo tanto, no tenemos nada que hacer ahí.'
Finalmente le preguntamos si su propia opinión sobre el conflicto Israel-Hamás no le parecía ligeramente sospechosa, contestó con firmeza: 'En absoluto. Yo siempre he sido bien clara: a los cerdos sionistas hay que colgarlos de los postes de alumbrado público', dijo, y se despidió de nosotros con un puño en alto, diciendo 'Gaza Libre!'.
No quisimos consultarle sobre sus acusaciones en 2012 por 'violaciones a los DDHH... en Canadá'. Mejor nos retiramos en silencio, meditando por qué el mundo irá como va.