Joël Dicker
Traducción de Juan Carlos Durán Romero
Editorial Alfaguara
648 páginas
#prenda198
Quién mató a Nola Kellergan es la gran incógnita a desvelar en esta incomparable historia policíaca cuya experiencia de lectura escapa a cualquier tentativa de descripción. Intentémoslo:Una novela de suspense a tres tiempos -1975, 1998 y 2008- acerca del asesinato de una joven de quince años en la pequeña ciudad de Aurora, en New Hampshire.En 2008, Marcus Goldman, un joven escritor, visita a su mentor -Harry Quebert, autor de una aclamada novela- y descubre que éste tuvo una relación secreta con Nola Kellergan. Poco después, Harry es arrestado y acusado de asesinato al encontrarse el cadáver de Nola enterrado en su jardín.Marcus comienza a investigar y a escribir un libro sobre el caso. Mientras busca demostrar la inocencia de Harry, una trama de secretos sale a la luz. La verdad solo llega al final de un largo, intrincado y apasionante recorrido.
Ha disfrutado muchísimo con esta historia. Y es que esta novela es un enorme rompecabezas, en el más amplio sentido de la palabra, del que Joël Dicker va mostrando piezas salteadamente pero nunca al azar. El lector debe fijarse en cada detalle de estas y es al final, cuando ya están todas descubiertas, que se siente cómo todo encaja a la perfección, cada detalle... cada color...
La sinopsis da información suficiente, añadir más sería un error. Lo ideal es que os pongáis en manos de Dicker y dejéis que sea él el que os vaya aportando más poco a poco. En torno a la trama principal tejeréis muchas hipótesis que se irán cayendo a medida que nuevas piezas del rompecabezas se vayan mostrando, algunas veces descubriréis vuestro error gracias a algún giro argumental. Aún encontrándonos dentro de un thriller, el ritmo es calmado, ir conociendo el pasado y el presente de cada uno de los personajes es importante y eso lleva algún tiempo. Así, he logrado sentirlos cercanos, bien construidos, tal vez ante el que me he quedado más fría es Nola, pero supongo que en cierto modo se debe a que ya no está, a que nos formamos una idea sobre ella gracias a lo que otros cuentan o a retazos de su pasado.
Sí, me ha encantado, me ha sorprendido a veces y, sobre todo, me ha convencido la forma en la que todo encaja, en la que todo está entretejido. Cualquier pequeño "pero" que pudiera apuntar queda diluido por las sensaciones que el conjunto me ha dejado.