La vida de Pi, de Yann Martel

Richard Parker se paralizaba cada vez que lanzaba un cohete de mano. Clavaba la mirada en la luz, las pupilas como dos agujeritos. Mis ojos no podían con esa luz tan brillante, con ese centro blanco incandescente y esa aureola rosa y roja. Tenía que mirar hacia otro lado. La sujetaba con la mano extendida y la blandía lentamente. Durante un minuto, me quemaba el brazo y todo lo que tenía a mi alrededor se iluminaba con una luz extraña. El agua, negra y opaca hasta hacía unos segundos, resultaba estar repleta de peces.

Premio Booker 2002, La vida de Pi es un libro magnífico que nadie debe dejar de leer. Me lo regalaron (uno de otros tantos que cayeron en mi cumpleaños) sabiendo que me encanta leer cosas diferentes, no solamente género juvenil, romántico y demás géneros que se me asocien. La verdad es que he tardado bastante en leerlo, no porque no me haya gustado (que me ha encantado), sino por motivos de estudios.
Dividido en tres partes cuenta la historia del propio Pi. Nos cuentan de él que es un chico al que la vida le ha impuesto duras pruebas.
La primera parte, y véase que no quiero desgajar el libro, porque para eso os lo leéis y disfrutáis de esta bonita historia, es como una novela autobiográfica del protagonista. Ubicada en un lugar exótico, Pondicherry, en la India, y el niño Pi (Piscine, un nombre un tanto peculiar) al que le fascinan los animales y que vive con sus padres y su hermano en un zoo. Nos cuentan su vida, su día a día y toda peculiaridad que tiene lugar en ella. Esta parte para la gente que le vaya más la intriga, le va a costar (a mi me pasó), suele ser un tramo bastante fosco donde te quedas encasillado, hay varias partes bastante graciosas que son amenas de leer, otras en cambio te entorpecen y no hacen más que atrasar la lectura.
Pero ya en la segunda parte todo va dándose forma dentro de nosotros. Te quedas pegado a las páginas, inmerso en ellas para ver que sucede. Aquí es donde te narra la historia de cuando etaba perdido en mitad del océano con una hiena, un orangután, una cebra y un tigre. Si, se que es difícil de creer, pero así nos lo cuentan y la verdad que a mi no me dejó casi ni respirar por ver que sucedía con cada uno de ellos y como continuaba la aventura de supervivencia oceánica de nuestros pequeños amigos. Aquí el ingenio es despertado por el hambre y la sed, la desesperación por creer que todo es un sueño y que de repente se despertará en Pondicherry, en el zoo con sus animales y su familia. También tiene una parte trágica, pero engancha mucho. Te lo lees del tirón, vamos.
Y ya la tercera parte es nada más y nada menos que sorprendente. Es cuando a Pi ya le rescatan y tiene lugar en México, les cuenta su experiencia a otros personajes y como sobrevivió. Es bastante cortita y cuando lo acabas, a mi por lo menos, se te queda como un vacío. Como si durante todo el viaje que ha hecho Pi, lo hayas estado haciendo tú también, te sientes cansado, fatigado y sobrecogido porque ya todo se acabó. También tiene momentos de todo tipo, desde unas buenas escenas para echarse unas risas y desvariar con el protagonista hasta tristes despedidas y rompecabezas.

Sin duda os recomiendo que os lo leáis. Está estupendamente y no os arrepentiréis, es una lectura diferente :)