La vida de una Maharani

Publicado el 26 enero 2013 por Historias De La India @HistoriasIndia

ayatri Devi, la hija del Principe Jitendra Narayan de Cooch Behar e Indira Devi de Baroda fue una mujer de increíble belleza. Creció rodeada de cientos de sirvientes algunos recomendados por la misma reina Maria de Inglaterra. Treinta caballos, seis mayordomos y cuatro cargas de equipaje los acompañaban cuando salía de vacaciones con su familia a su cabaña de verano. De su abuela aprendió que las esmeraldas combinaban mejor con saris color rosa que con saris verdes y de su madre a nunca llevar aretes de diamantes en las tardes de coctel. Un sencillo collar de perlas, saris de chifón en tonos pasteles y sandalias con cintas de seda serían sus prendas favoritas a lo largo de su existencia…

¿Qué quiere decir la princesa?

En el año 1911, la princesa Indira Devi de Baroda acompañó a sus padres al Durbar de Delhi donde todos los Príncipes de la India se reunieron a  presentar sus respectos a la corona Británica. El evento conmemoraba la ascensión al trono del Rey Jorge V y la Reina Maria del Reino Unido y por primera vez un monarca Británico visitaba el subcontinente. Este durbar o recepción también celebraba la transición de la capital de la India de Calcuta a Nueva Delhi. El evento duró varias semanas y entre partidos de polo y fiestas de jardín Indira Devi caería rendida a los encantos de Jitendra Naranjan, el hermano menor del Maharaja de Cooch Behar, un pequeño principado al noreste del país.

Al terminar las festividades y regresar a casa, la princesa valientemente le escribió una carta a su prometido el Maharaja de la región de Gwalior, Madho Rao de Scindia, donde a escondidas de sus padres expresaba su deseo de romper el compromiso.

En Baroda la corte se encontraba sumergida en los preparativos de la boda cuando el padre de Indira recibió un telegrama inesperado del prometido donde señalaba “¿Qué quiere decir la princesa en su carta?”.

Indira Raje de Baroda

Los padres reprimieron a Indira en vista de la repercusión diplomática y el escándalo que representaba rechazar el gobernante de un reino tan importante, sin embargo, la princesa se mantuvo firme en su decisión. Le preocupaba que su prometido era 16 años mayor que ella y ya se había casado, pero su Maharani no había podido concebir, por ende necesitaba un heredero al trono. Por otro lado, era un hombre muy conservador y no se imaginaba una vida confinada en un palacio sometida a estricta seclusión. Tendría que permanecer la mayor parte de su tiempo únicamente en compañia de mujeres y el único hombre al que se le permitiría ver sería su esposo, renunciando así a la presencia de sus hermanos a quienes tanto adoraba.

El Maharaja rechazado comportándose de manera ejemplar, eventualmente le envió una carta comprensiva al padre de Indira manifestándole que no se encontraba molesto la cual confirmó firmando la misiva como “tu hijo”.

El padre de Indira no estaba preocupado por el hecho de que Cooch Behar fuese más pequeño que Baroda o porque Jitendra no fuese el gobernante sino porque la familia del Maharaja era muy Occidentalizada. Los padres de Jitendra llevaban un estilo de vida “eduardiano” y socializaban con frecuencia con la élite Europea de la época. Se decía que eran los favoritas de la Reina Victoria y las hermanas del Maharaja se habían casado con hombres Europeos. Tenían la reputación de ser los menos ortodoxos de todos los reinos y ello perturbaba enormemente a Sayajirao de Baroda, el padre de Indira. A pesar de las presiones, Jitendra e Indira continuaron su affair a través de correspondencia y reuniones secretas y finalmente en 1913 obtuvieron permiso para casarse. La boda se llevó a cabo en Londres sin la presencia de ningún miembro de la familia Real de Baroda.

Tres semanas después de la boda, el hermano mayor de Jitendra, quien era el Maharaja reinante, se enfermó de gravedad. Dos años antes se había enamorado de la  actriz Inglesa Edna May y manifestó su deseo de desposarla. Su familia no permitió que ello ocurriese y Rajendra juró beber alcohol hasta morir, ocurriendo el fatal desenlace y ascendiendo bajo estas circunstancias al trono Jitendra e Indira como nuevos soberanos.

Entre viajes a Europa, Calcuta y Darjeeling la pareja real comenzó una nueva familia y entre 1914 y 1920 procrearon dos niños y tres niñas. Su cuarta hija Gayatri Devi, pasaría a la historia, como una de las Maharanis y socialités más destacadas tanto a nivel nacional como internacionalmente.

Gayatri Devi

La princesa nació el 23 de mayo de 1919 a las ocho en punto de la mañana. De acuerdo a sus astrólogos hindúes la letra auspiciosa de la Maharani era la “G” y fue llamada Gayatri, sin embargo sus más allegados y conocidos la llamaban “Ayesha”. Su infancia se vería influenciada por dos mujeres excepcionales: su madre quién enviudó en 1922 y se convertiría en regente de Cooch Behar por más de una década y su abuela materna la Maharani de Baroda, cuyo esposo transformó la región en uno de los estados principescos más avanzados.

Gayatri Devi durante su infancia

Luego de una cacería

A los 13 años

A la edad de 12 años, en un partido de polo en Calcutta, se enamoró perdidamente del guapísimo Sawai Man Singh II, el Maharaja de Jaipur quien en ese entonces contaba con 19 años. No solo era un hombre acadaulado y atractivo sino un excelente jugador de polo y destacado deportista. El Maharaja ya tenía dos esposas, ambas fueron compromisos de estado, y jamás esperó caer rendido bajo el encanto de la hermosa princesa tan diferente a las ortodoxas damas de Rajput que él conocía.

Cuando enviaron a Gayatri al Monckey Club a terminar sus estudios en Knightsbridge, Gayatri y Sawai se reunieron en secreto y se comprometieron. Su romance encontró resistencia de ambas familias. Temían que Gayatri estuviese condenada a una vida de seclusión como era la costumbre en un estado tan feudal como Jaipur y eso destruyera su alegre personalidad.

El dia de su boda

A la larga, el matrimonio fue un gran éxito. En 1940 se convirtió en la tercera Maharani de Jaipur y aceptó su nuevo rol con mucha gracia. Se ajustó a las formalidades y restricciones de la vida en la zenana y supo utilizar su autoridad para traer las mujeres del palacio al siglo veinte.

Gayatri Devi en su palacio en 1940

La llegada de la segunda guerra mundial ayudó a agilizar el proceso de emancipación, la Maharani organizó varios talleres y en 1943 abrió la escuela para niñas “Gayatri Devi” con 40 estudiantes  y una profesora de inglés. Con el tiempo llegó a convertirse en una de las mejores escuelas de la India.

La pareja con su Bentley al fondo

Era una excelente amazona

Al llegar la independencia de la India en 1947, Jaipur se unió con otros 18 estados principescos y se convirtió en el estado de Rajasthan con Jaipur como su capital y aunque el Maharaja fue nombrado gobernador, todo el poder descansaba sobre el partido en el poder, llamado el Congress. La preocupación por lo que consideraban un abuso de poder generó que muchos miembros de la nobleza, entre ellos, Gayatri Devi, incursionaran en la política y fundaron al partido Swatantra el cual hacía oposición al partido Congress, el partido de Indira Gandhi.

En Octubre de 1949, la Maharani tuvo su primer y único hijo, el Principe Jagat Singh de Jaipur a quién se le otorgó el título de Raja de Isarda.

Gayatri Devi y su familia

Con su hijo el Principe Jagat Singh

Con su esposo el Maharaja Sawai Man Singh II de Jaipur

En 1962 Gayatri Devi hizo su primera aparición en un discurso público y participó en su primera elección como miembro del Parlamento, ganando con una contundente victoria sobre su oponente del Congress y pasando asi al libro Guinness de Records al asegurar una mayoría de 192.909 votos y en 1967 participó de nuevo, manteniendo de esta manera su asiento en el gobierno.

Con la inolvidable Jackie Kennedy en 1962

El gobierno introdujo una ley en mayo de 1970 para abolir los privilegios de la nobleza despojándolos de sus títulos, por esto, Gayatri Devi y su esposo volaron a Inglaterra. Un mes más tarde, el Maharaja colapsó y murió mientras hacia de árbitro en un partido de polo en Cirencester y su hijo mayor, hijo de su primera esposa, fue proclamado Maharaja mientras Gayatri Devi pasó a ser Rajmata o Reina Madre.

A pesar del luto que embargaba su alma, Rajmata fue persuadida de participar en las elecciones parlamentarias para un tercer término en 1971, pero ese mismo año fue aprobada una nueva ley que desconocía por completo la clase principesca. Durante el famoso período del estado de emergencia decretado por la entonces Primer Ministro Indira Gandhi, se suspendieron las leyes y se realizaron arrestos en masa en nombre de la seguridad del pais que se encontraba “bajo amenaza” y de esta manera en Julio de 1975 Gayatri Devi y su hijastro el Maharaja Bhawani Singh fueron arrestados y encarcelados en la cárcel de Tihar en Delhi.

Los cargos fueron leves basados en el delito de “retención de divisas” supuestamente por unos francos suizos encontrados en su residencia.  Aunque su espíritu se mantuvo fuerte, su salud comenzó a resquejebrarse y luego de casi seis meses en humillantes condiciones Gayatri Devi fue trasladada al hospital y luego liberada bajo palabra. Las condiciones se mantuvieron forzadas hasta que Indira Gandhi en las elecciones de 1977 salió del poder temporalmente.

Se retiró de la política y escribió su autobiografia “A princess remembers” la cual sería posteriormente la base de la película “Memorias de una princesa Hindú” de Francois Levie.

En su palacio de Jaipur

Durante sus dos décadas de viudez, Gayatri Devi se rehusó  a permanecer en seclusión como se hubiese esperado de la viuda de un gobernate Rajput. Ella y su esposo habían sido amantes del deporte y el entretenimiento y ante la indignación de los tradicionalistas, Rajmata continuó viviendo su vida al máximo.

Amaba viajar y pasaba los veranos en un pequeño departamento en Knightsbridge y los inviernos en Jaipur en la casa de campo conocida como Lilypool, una vivienda que construyó su esposo luego de convertir el Rambagh Palace en un hotel en 1950.

RambaghPalace

Lilypool

A diario recibía una lista de personalidades importantes que se hospedaban en el hotel y si no se encontraba ocupada, los atendía en su residencia invitándoles a una copa de champane. Pero aquellos que le desagradaban les cargaba en su cuenta la botella.

Falleció a la edad de 90 años en el año 2009 sobreviviendo a su hijo que murió en 1997 y dejando un testamento donde luego de una gran batalla legal, todas sus propiedades pasaron a manos de sus nietos Devraj and Lalitya Kumari.

Durante su funeral

Gayatri Devi tuvo reconocimiento internacional por su belleza luego que Cecil Beaton la fotografiara en 1943 para la revista Vogue y la nombrara una de las 10 mujeres más bellas del mundo, sabiendo mantener su belleza hasta una edad avanzada. Nunca hizo alardes de su apariencia, no obstante supo llevar en sus hombros con glamour el título de Maharani…

Escrito por Lorena Mena© 2013

Fuentes Bibliográficas:

Wikipedia

Rajmata Gayatri Devi

A battle of wills: Gayatri Devi’s £250m legacy

Ilustraciones:

Lorena Mena

Fotografías:

Pinterest.com

Artículos relacionados:

Maharajas. Parte I

Maharajas. Parte II

Maharajas. Parte III


Archivado en: cultura, Idiosincrasia Tagged: vida de la realeza hindu, Vida de una maharani hindu, vida de una princesa hindu