La Vieja Negrilla, es una de las culturas más emblemáticas y fotografiadas de la ciudad de León. Obra del artista Amancio González, por dos veces, ha sido ubicada en la Plaza de Santo Domingo (ya que la primera vez, fue "atropellada" por un vehículo).
Según palabras de su autor, el nombre lo toma "de un árbol gigante que hay en Villahibiera de Rueda, el pueblo de mi infancia, y que en realidad es un olmo pero aquí, en León, a los olmos se les llama 'negrillos' y cuando alguno de ellos se hace muy grande entonces se les llama 'negrillas' o 'negrillones', como en Boñar".
La escultura de Amancio, se extiende como el árbol de su niñez, con un brazo tendido sobre el suelo a modo de raíz que quiere agarrarse a la tierra. Permitiendo además a los niños, pasear y jugar por su interior, como el mismo jugaba con el viejo árbol de su pueblo.