El apartamento en donde vivo, en este pueblito alemán, queda justo al lado de un colegio y ya se ve el movimiento de muchos niñxs aunque aún no están formalmente abiertos. Varias veces paso justo enfrente cuando salgo a hacer mercado. Como ya casito es verano me pongo pantalones cortos, uso zapatos deportivos y me pongo, para no quemarme, una gorra tipo beisbolista. Y un maletín vacío en la espalda. A veces siento que debería ir a tomar clases para aprender a sumar, restar, multiplicar y dividir pero creo que me delataría mi barba y sus canas. Especialmente las canas.