No conocía este fruto seco hasta que vine a vivir en Italia, es un fruto típico del otoño y muy apreciado por los italianos, su consumo también es popular en Alemania y otros países de Europa. En Roma existe un comercio entorno a las castañas, se pueden observar vendedores ambulantes llamados "caldarrostai", venden diez castañas por 5€. Me parece que es un fruto muy saciante, me bastan cinco para sentirme satisfecha.
Las castañas, de hecho, presentan un alto valor nutricional, tienen fibra, proteína, sales minerales, vitamina B, como es alta en carbohidratos no la aconsejan para los diabéticos. Últimamente he estado observando en los supermercados harina de castaña como alternativa a la harina de trigo y esto para quienes quieren evitar el gluten y preparar recetas dulces como saladas. La he probado para tortas y creo que funciona bastante bien.
Es muy común consumirlas asadas en la sartén o en horno, de agradable sabor y comerlas caliente son más que bienvenidas en invierno. Lástima que estén disponibles solo hasta diciembre.