Las Edades de Aranda plantea centrar la muestra del 2014 en el cordero y el vino, símbolos de la eucaristía.

Publicado el 16 agosto 2013 por Medinalogo Juan José Limón Luque @medinalogo

La eucaristía es el tema que más posibilidades tiene para guiar la exposición de la Fundación Las Edades del Hombre en Aranda de Duero (Burgos) de 2014. La última palabra la tendrá el patronato de esta institución cultural-religiosa de las diócesis de Castilla y león, que se reunirá para tomar la decisión de aceptar la propuesta de que este sacramento de la Iglesia Católica articule la muestra en la localidad burgalesa. Además de las lógicas argumentaciones doctrinales para barajar la eucaristía como leitmotiv, también se maneja la vinculación de Aranda con tres productos que simbólicamente forman parte de la comunión, como es el cordero, el vino y el pan, productos en los que este municipio tiene renombre nacional e internacional, caso de sus asados de lechazos, los caldos de la Ribera del Duero, y el mencionado pan.
El secretario general de la Fundación Las Edades del Hombre, Gonzalo Jiménez, señaló que aún no hay nada decidido, pero reconoció que es una propuesta que ya se ha planteado entre los prelados de la Comunidad. "No hay nada fijado" subrayó, a la vez que advirtió que ni siquiera hay una propuesta formal sobre el lema de la edición de 2014, si bien el obispo de Ciudad Rodrigo, el arandino Raúl Berzosa, ya se ha mostrado partidario de esta opción.
Gonzalo Jiménez reconoció que "es cierto que la eucaristía no ha sido motivo de ninguna exposición de Las Edades del Hombre", por lo que -admitió- "no es descartable" que se baraje como tema para la muestra en Aranda de Duero. Aunque es una cuestión que se decidirá colegiadamente, como es habitual en este órgano rector, el secretario general de la institución cultural-religiosa, consideró que la eucaristía es un motivo "muy oportuno" para cualquier exposición de Las Edades. La consagración es un sacramento instituido por Jesucristo, mediante el cual, por las palabras que el sacerdote pronuncia, se transustancian el pan y el vino en el cuerpo y la sangre de Cristo. Además, en la liturgia católica se utiliza la frase de Juan el apóstol cuando ve acercarse a Jesús y al que se refiere como "ahí está el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo".
Uno de los máximos partidarios en este sentido, es el obispo de Ciudad Rodrigo (Salamanca), Raúl Berzosa. Sus raíces vernáculas con la localidad burgalesa le llevan a apostar por el vínculo de la muestra del municipio ribereño con la eucaristía, a través del cordero, vino y pan. "Mi disposición es hacer todo lo que pueda para ayudar a que la exposición sea un éxisto".
El prelado de la Diócesis mirobrigense recordó que la idea de vincular la exposición de Las Edades con estos productos de gran raigambre en Aranda es del sacerdote, profesor universitario y periodista, Joaquín Luis Ortega. Berzosa cree que los obispos de Castilla y León han recibido con interés esta propuesta, que vincula la eucaristía con el pan, el cordero y el vino, símbolos de la ofrenda de Cristo para salvar a los hombres. De todos modos, el obispo también advirtió de que la decisión definitiva deberán adoptarla en el seno del patronato de la Fundación de Las Edades del Hombre.
Vinculado a Las Edades del Hombre desde que la creara José Velicia en 1988, el sacerdote soriano, pero residente y familiarmente vinculado a la provincia de Burgos, Joaquín Luis Ortega, armó su propuesta en la conmemoración este año del centenario de la Adoración Nocturna en Aranda de Duero con la conferencia "Un siglo de pan, de vino y cordero". "Fue entonces cuando me planteé el paralelismo entre la aucaristía y estas señas de identidad de Aranda de Duero", señaló desde su domicilio en Burgos. En su opinión esta vinculación no es frívola, pues "Jesucristo se hace llamar Cordero de Dios, y en la última cena se hermana con el pan y el vino", aunque reconoció que si su propuesta es admitida, "hay que tener mucho pulso para delimitarla ben".
Ortega planteó la idea al arzobispo de Burgos, Francisco Gil Hellín, a quién "le pareció estupendo", animándole a que escribiera al resto de prelados, y que "me han ido contestando". Aunque prefirió guardarse las respuestas, cree que el Patronato de la Fundación sí podría dar el visto bueno. Por si acaso, ya tiene una lista de obras a mostrar.