Y si nos paramos a pensarlo, la gente que no trabaja de paparazzi (y que no se llama Albret) tan sólo saca la cámara de fotos de casa cuando cree que va a vivir momentos importantes, divertidos o que de alguna forma quiere recordar. Por lo tanto las fotos que publicamos en fareborn o en el fotoló dicen mucho más de nosotros de lo que pensamos y nos diferencian más allá de lo que estemos fotografiando en sí mismo.
Yo creo que tengo un 50% día 50% noche, aunque en mi defensa diré que si hago fotos de botelloneos nocturnos es porque la mayoría de las veces en que consigo reunir a mi grupo de amigos es de noche, puesto que llevan la agenda más apretada que el abogado de Ramoncín.
Pero a fin de cuentas creo que soy más un animalillo diurno que nocturno... ¿y tú?