Ya han transcurrido cuarenta años desde que terminó la gran guerra que puso fin a la sed de conquista de Aster el Tirano, pero el Mundo Emergido sigue sin encontrar la paz. Dohor, Caballero del Dragón convertido en rey de la Tierra del Sol, está extendiendo lentamente su influencia sobre el resto de las Tierras Emergidas. Pero no es el único que conspira por el poder. La misteriosa Gilda de los Asesinos, cuyos miembros viven consagrados al asesinato en todas sus formas, ha resucitado el terrible y sanguinario culto a Aster. Para llevar a cabo sus oscuros planes, la Gilda busca por todas partes adeptos y guerreros como Dubhe, quien, a los diecisiete años, es la ladrona más hábil de la Tierra del Sol, capaz de entrar como una sombra en las casas mejor guardadas y sustraer todo cuanto haya de valor. Las Guerras del Mundo Sumergido I. La Secta de los Asesinos tiene una portada, para empezar, que es una preciosidad. Un diseño genial y fantástico para lo que es la novela.
La protagonista, niña asustadiza e indefensa, evoluciona de tal manera que es uno de los puntos más fuertes de la novela. La evolución del personaje de indefenso y débil, a una mujer letal y fuerte que arrasará para conseguir su objetivo.
La novela empieza con el conocimiento de la protagonista, Dubhe, diecisiete años y vive, más bien, sobrevive, gracias a que roba y podemos ver cómo lo hace. Nunca quiso ser asesina pero tendrá que serlo por las circunstancias del destino. Ha permanecido dos años ocultas pero ahora la Gilda, un personaje misterioso, la quiere y dará con ella.
'Una niña de la muerte'
¿Da miedo, verdad?
Pues es el ''mote'' que se les da a los niños que comenten asesinatos en esa época o a los niños que sus madres han muerto al dar a luz. La protagonista, Dubhe, asesinó con ocho años. Su primer víctima, un amigo de juegos cuyo comienzo fue una típica pelea pero después su muerte la perseguirá siempre. Después vinieron todos conjuntos por las circunstancias del destino.
Consecuencia de todo esto. La Secta de los Asesino la quiere dentro pero Dubhe, obviamente, no quiere pero es presa por una extraña maldición donde un animal o bestia obliga a matar y la única solución y salvación es involucrarse en esa secta. Esa organización rinden culto a un dios oscuro y viven en la Tierra de la Noche donde sólo se distingue cuando es de día porque en el cielo no se hallan las estrellas.
En esta novela se demuestra que los finales felices no son para siempre y siempre hay algo que lo romperá pero siempre también habrá que luchar para que vuelva un final feliz. Todo ello gracias a la gran protagonista, el punto fuerte de la historia y el misterio Maestro. Lo descubriréis todo leyéndola, por supuesto.
Tiene buena ambientación, buenas descripciones y buen argumento pero quizá falla el ritmo y la acción pero no está nada mal del todo aunque resta mucho. Gran protagonista, historia genial pero ritmo lento. En resumen, lo resumiría así, valga la redundancia.
Lee los primeros capítulos AQUÍ
Espero que la segunda parte mejore su ritmo y acción porque confío en ello.