Las Píldoras
Estaba pensando que este mismo proceder deberíamos tener todos los cristianos cuando vienen a nuestra vida situaciones conflictivas, difíciles o somos envueltos en muchas circunstancias adversas.. Nosotros tenemos un libro que esta lleno de pildoras de esperanza. Ese libro es conocido como la Biblia y allí podemos encontrar todos los medicamentos necesarios para hacer crecer la fe interna y de esta forma ser milagrosamente aliviados o por que no decirlo sanados completamente de cualquier dolor del alma.
La lectura y la apropiación de lo que el Libro nos presenta nos llenaran de la esperanza que se necesita para activar la intervención divina en nuestras vidas. La carencia de estos elementos es lo que en la mayoría de los casos detiene la solución pronta de nuestros dolores interiores, llámense físicos, emocionales o circunstanciales.
Uno de los versículos del Libro que ha sido muy significativo durante todos estos años de mi vida cristiana ha sido Juan 8:31-32 donde Jesús dice:
“Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres. “
Les decía que cuando experimento esos dolores de cabeza sean por el motivo que los provoque acostumbro tomar algunas píldoras para el dolor y después de minutos el dolor desaparece. Para hacer desaparecer el dolor necesito activarme y buscar el medicamento, tomarlo y esperar. Lo mismo ocurre en todas esas situaciones que vivimos. Necesito ir a la Palabra de Dios, buscar mi promesa, creerla apropiándome de ella de forma personal, confesarla con mi boca sin cesar y esperar que el milagro se active.
Estas píldoras activadoras de fe que encontramos en La Biblia necesitamos tomarlas diariamente para convertirnos en cristianos victoriosos en todas las áreas de la vida diaria.