Unos y otros querian mostrar la mejor instantánea echa con el movil o con una cámara fotográfica, pero la verdad que hasta bien entrada la noche no se puso a nevar con ganas.
Más de una vez levanté la persiana para mirar el manto blanco que cubria el jardin, y saborear el silencio de la noche deseando que amaneciera pronto.
Me gusta pisar la nieve cuando está inmaculada y se escucha el sonido de mis pies al andar con un sonido muy peculiar que me remonta a la niñez. Es como si me adentrase en un mundo mágico de blancos sueños y felices momentos.
Aún asi no pude evitar el asomarme al parque con mi cámara nueva dispuesta a descubrir la belleza en algun rincón. Al poco rato me encontré con estas preciosas hojas que hacia dias que se resistian a morir y que aliviadas por la blanca nieve gozaban bellísimas de una nueva vitalidad. Estaban fundidas con la nieve, como queriendo recuperar la esperanza de nuevo.
Hacia frio, mucho frio...pero es un frio seco, muy bueno para curar chorizos y jamones como solemos decir por aqui.
La vida de los pueblos es rica en afectos, porque más o menos todos nos conocemos, no somos un número perdido en el asfalto de las grandes ciudades.
Me gusta vivir aqui.
Nada, lo dicho...la próxima nevada haré preciosas fotografias para todos.