Unas horas para emprender el viaje de mi vida, el periplo por el norte y por la capital del amor, la visita a las joyas del Báltico, Estocolmo y Helsinki, y el fin de la ruta en París. Una combinación, como ya os dije, extraña, pero precisamente por única va a ser especial. Pernoctar en barcos, estadios y con curas, pasar frío, aunque será menos del esperado, navegar por el Báltico abriéndonos paso entre los restos de mar congelado, descubrir cada islote del archipiélago de Estocolmo, cada calle empedrada de Helsinki, o cada colina de la urbe Parisina, es sólo el principio.
Y el principio es hoy, el temido día de completar la maleta. Los 15 tristes kilos a los que tiene que quedar reducido mi equipaje, gracias a Ryanair. Creo que es la única pega del viaje! Los demás vuelos ya son con Easy Jet, de modo que podremos venir cargados de regalos y vivencias que pesen 5 kilos como máximo! xD
No se me ocurre mucho más que decir. Estoy en un estado de euforia que ni siquiera me permite pensar con claridad para que no se me olvide nada mañana. A las 8:00 comienza el trayecto en bus, a las 14:00 sale el avión de Madrid, y sobre las 18:00 llegamos al aeropuerto sueco. Una hora y media más tarde llegaremos al centro de Estocolmo, pues el aeropuerto de Ryanair (sí, otra vez ellos...) está a 100 km de la capital. Por tanto, me espera un duro día de viaje.
Me llevo el wifi en el bolsillo, así que actualizaré si el tiempo me lo permite, e informaré de algún detalle en un rato muerto. De momento sirva esto como adelanto, de lo que seguramente será una experiencia imborrable de por vida. Europa, allá vamos! ;)