La costumbre de correr o bajar fallas, una especie de carrera por el bosque que los fallaires hacen con grandes troncos encendidos, es anterior a la práctica de las hogueras y común en diferentes poblaciones de los Pirineos, sobre todo en la Alta Ribagorça, Pallars Jussà y Pallars Sobirà. Las fallas se hacen con auténtica tea de pino y se pegan a un mango de fresno o avellano.
La noche de la bajada de les fallas se sube hasta un lugar elevado de una montaña cercana al pueblo, donde los fallaires encienden sus fallas. El trayecto, que es guiado por el mozo mayor o "cap de colla". Se empieza a bajar, primero caminando por el bosque y, después, se empieza a correr hasta llegar al pueblo. Allí los músicos tocan la melodía de las fallas, se recorren las calles y finalmente se tiran las fallas a la hoguera.
Este vídeo recopila las fallas de 2013.