Letra
Publicado el 27 enero 2014 por Vicente Luis Mc
Lunes, había descubierto los libros electrónicos un sistema de lectura del cual siempre había sido reticente prefería el papel, pero en aquellos días en los que su estado físico no era el más indicado para sostener nada sobre las manos y menos para pasar las páginas haciendo movimientos con los brazos lo encontró una buena alternativa.Su incursión en el mundo de los libros electrónicos le reconcilió con ellos era una manera muy útil detener gran cantidad de material para leer sin necesidad de complicarse demasiado la vida después de todo los libros electrónicos no pensaban, no ocupaban demasiado espacio y sobre todo no acumulaban polvo.Una amiga de su madre le había regalado aquel misterioso aparato que tanta fascinación estaba ejerciendo sobre ya que desde el primer momento no dejo de introducirle textos.Cierto era que prefería el papel pero no siempre tenía espacio en la mesa para acumular todos los libros que leía la vez.Con lo cual aquel aparatito tan extraño le servía para tener una pequeña biblioteca siempre a su disposición como quien tiene una farmacia abierta 24 horas al día, le había parecido muy emocionante la idea de aumentar el tamaño de la letra para no dejarse la vista a las primeras de cambio sin duda la tecnología por primera vez en mucho tiempo se había vuelto a poner de su lado.Podría seguir alimentando sus ansias de eterno lector con la intención y esperanza de convertirse en un escritor medianamente decente.Estaba ensimismado en esos pensamientos cuando recordó que debía seguir avanzando en el conocimiento de aquela para tejo al que ya había tomado cariño a pesar de que en principio no le sugirió nada bueno.Tipo clásico que amaba el papel pese a haber descubierto la parte cómoda de la tecnología ,la cual pensaba usar en su beneficio después de todo un voraz lector como él tenía que cuidar sus ojos ,los cuales ya andaban bastante machacados de fábrica al igual que otras partes de su cuerpo.Amaba leer y acumularé pitones da igual en el formato que fuera el descubrimiento de reconcilió con la ciencia.Los libros electrónicos le parecían algo muy higiénico silencioso y discreto además de ser económicamente más accesibles en ocasiones que los de formato papel, que seguían rodeándole por todas partes.El haber sido un lector tardío le convirtió en un adicto a la lectura, quizás por aquello de recuperar el tiempo en que no había descubierto aquel universo silencioso solitario y lleno de emociones.Gracias al cual también del mismo modo sintió la llamada de la escritura.Era un hombre extraño que tenía la habilidad de llegar tarde a todo.El lunes estaba siendo una jornada difícil, pero al final del día llegaría el momento de reconciliarse con el mundo a través de aquellos seres a los que tanto amaba sus fieles amigos los libros sus compañeros en los momentos de peor estado anímico, no le importaba que fueran silenciosos y no le dieron conversación al menos le consolaba que le ayudasen a viajar sin necesidad de moverse.Le diesen la posibilidad de vivir otras vidas que ocasiones eran más emocionantes que la suya.Pienso para así que ya tenía dos tipos más a los candidatos el inventor del libro electrónico y el inventor de la imprenta ambos le habían abierto una gran cantidad de posibilidades de huir demundo que a veces le resultaba algo hostil y desagradable la lectura de ya fuera en formato papel o electrónico le parecía uno de los vicios más limpios que podía tener.Habia llegado a la conclusión de que la escritura era la manera que tenía de ahorrarse el sillón del psicoanalista. Y de paso desahogarse sin molestar a nadie o al menos eso prefería pensar.Había llegado el momento de continuar con todo lo que tenía pendiente sabiendo que en algún momento podría dejarse caer por el maravilloso mundo de las letras de igual el formato que fuera la cuestión para él era ayer lo necesitaba tanto como el respirar.Después de todo no hacía mal a nadie y alimentaba su mente.Estaban estos pensamientos cuando volvió a la página número 24 de su libro teórico sobre redes sociales y nuevas tecnologías, no era el tipo de lectura que más le agradaba pero si algo que había iniciado y tenía la firme convicción de terminar después de todo no era un hombre de dejarse las cosas a medias por difíciles y complicadas que estas fueran.Aumento del tamaño de la letra de lo que estaba leyendo y siguió adelante tenía mucho por hacer, en aquel momento volvió a dar las gracias aquí la persona que secretamente le había regalado aquel aparatito cualquier excusa era buena para sumergirse en un universo paralelo que le hacía especialmente feliz aunque en ocasiones tuviera que volver a la cruda realidad.Aquel descubrimiento tecnológico que apareció su vida por pura casualidad le hacía esbozar más de una sonrisa en momentos estomagantes.Sonrió mi nuevo libro electrónico bajo el dedo suavemente y continuó...Había nacido en un ferviente defensor de la lectura en cualquiera de sus formatos.