Como podrás imaginar, el objetivo para este año es el de que aprendan un poquito de las técnicas del fútbol, otro poquito de disciplina de equipo y un mucho de pasárselo bien. Creo que son los tres ingredientes básicos para estas edades independientemente del deporte del que se trate.
En los partidos, al ser equipo de primer año, acostumbramos a perder. Los otros equipos contra los que jugamos suelen ser un año mayores y se nota.
De cualquier forma, desde septiembre hasta hoy, que han jugado contra el Cornellá, se nota un cambio impresionante en su colocación en el campo y su forma de jugar, aunque la filosofía sigue siendo la misma.
En Cornellá hemos recibido un siete a uno, bueno, aunque el uno nos lo han anulado por fuera de juego... sí, fuera de juego, aunque los niños todavía no saben ni qué es eso. Lo de perder o ganar, para nosotros no es tan importante. Creo que la filosofía es correcta y ya tendrán tiempo de empezar a competir en serio.
Lo de algunos entrenadores y los árbitros, mejor lo hablamos otro día.
Si me lees y tienes un hijo en la misma categoría o situación, reflexiona sobre lo que te estoy diciendo... Ellos son lo primero... Si pierden, no les grites... Si ganan, celébralo sin hacer daño a los otros... Consigue que se diviertan, esa es la forma en la que realmente ganan...
Que vaya bonito,