1. No tengo idea.- No sé lo que va a pasar. Las personas sorprenden, para bien y para mal.
2. Tengo clara idea.- Sé lo que está pasando, no necesito hacer una encuesta para confirmarlo y sin importar cuántas vueltas le dé: está pasando.
3. No hay que "dejar pasar".- No está la vida como para dejar que alguien le coloque a una en una posición que no corresponde, incluso cuando no haya mala intención de su parte. En otro orden de ideas: tomar y aprovechar lo mío es bueno y conviene.
4. Hay que "dejar pasar".- Pocas cosas importan; estar en pie de lucha no es lo mío. Muchas veces vale más una relación o cuidar a la otra persona, que poner puntos sobre las íes. En otro aspecto de "dejar pasar", de verdad que no hay que forzar nada: estar de terca queriendo un X que se niega, la deja a una sin el Y que estaría mejor.
5. Voy a morir.- Es diferente saberlo como una nota informativa, como una sabe que hay agua en la luna, a saberlo con el cuerpo, con el alma. Tengo un tiempo limitado para hacer lo que quiero, tan limitado que el "quisiera" es una pendejada -busqué sin éxito una palabra más justa-. En estrecha relación con esto: atender el cuerpo es primordial porque ni trabajo, ni crianza ni nada funciona, si el cuerpo no funciona.
6. No estoy muriendo.- Lo que se echó a perder, ahí queda; lo que no fue: no fue. "Esto" es la vida que hay y está padre porque la alternativa es no estar viva: no son alternativas reales todas las situaciones vitales que puedo imaginar; las opciones reales son: a) tomar los recursos que tengo y hacer algo con ellos, b) no hacerlo, c) morir.
7. La familia es primero.- Se necesitan aliados en este mundo. La familia es eso a tope; es eso y un camino espejo de la identidad. Y eso está por encima de muchas cosas.
8. La familia no siempre es primero.- Encuentro y creo la forma de mi familia en lo que voy andando, sin ajustarme a lo que apriete. Si hay que tomar distancia, simbólica o literal, de cualquier persona en cualquier momento, la tomo, por el tiempo que sea necesario. Lo primero es cuidarme a mí misma.
Silvia Parque