[ACTUALIZADO] Un equipo unido, cohesionado, con el mismo objetivo y las mismas ganas por lograrlo y una afición confiada, que apoya sin fisuras a su selección. Es lo que nos ha dejado este Mundial de Sudáfrica, que ha vuelto a demostrar a todos que la unidad y el afán de superación son las claves para todo éxito. Ha tenido que ser nuevamente el fútbol el que nos enseñe el camino para la victoria colectiva. En un momento de dificultad extrema como el actual ése es el secreto.
Ayer ganó España (leed, por cierto, esta maravillosa crónica de José Sámano, de El País) y demostró a la maquinaria infalible alemana que la unión hace la fuerza. El propio seleccionador teutón, en un arranque de deportividad y clase, lo admitió sin ambages: “Son un equipo maravilloso (…). Han hecho un grandísimo equipo, con una unidad increíble”.
Tras la euforia de la victoria y el histórico pase a la final del Mundial, sólo falta que lo que ha unido el fútbol, no lo separe el hombre.
ACTUALIZACIÓN: Los compañeros de Radiocable.com han enlazado este artículo en uno relacionado con la repercusión que ha tenido el Mundial en la blogosfera. Os dejo el enlace.